El corredor de Nogarejas a Riello se completa con 3,7 millones de inversión
El consejero de Fomento visitó la restauración del puente de Sopeña de Carneros.
La Junta de Castilla y León ha iniciado la segunda fase de la mejora de la carretera LE-133 —más conocida como carretera de Nogarejas—, en el tramo comprendido entre Destriana y el cruce con la LE-125 (carretera de Sanabria), donde muere el vial. La actuación se adjudicó en 3.789.690,88 euros a la UTE Pavimentos Asfálticos Castilla, S.A.- Constructora San José, S.A.
La obra se enmarca en el corredor que comunica el sur de la provincia con el Eje Subcantábrico, en el que la Administración autonómica ha invertido 23 millones para la modernización de 81 kilómetros. La LE-133 ya contó con una primera fase (Astorga-Destriana), que se une al arreglo de la LE-451 (carretera de Pandorado), de forma que se comunican las comarcas de Astorga y La Bañeza con Riello.
Los vecinos de Destriana, Quintana y Congosto y Castrocontrigo esperaban el arreglo desde hacía tiempo al mejorar sus comunicaciones y, por otro lado, Castrillo de Cabrera, Encinedo y Truchas resultan beneficiados por la mejora, al facilitar sus comunicaciones con la capital maragata, cabecera de su partido judicial.
El consejero de Fomento y Medio ambiente, Antonio Silván destacó la importancia de la obra en Sopeña de Carneros, donde visitó la recuperación del puente atirantado que salvaba el tuerto en la carretera de Pandorado y que se ha instalado ahora en la zona de ocio de Sopeña de Carneros, gracias a una inversión de 360.000 euros.
Silván recordó que la crisis económica obliga a su departamento «a reorientar la política de infraestructuras hacia la conservación más que hacia la obra nueva». La junta no descarta los objetivos del Plan de Carreteras en vigor, si bien considera imposible mantener el 2020 como fecha para su consecución. El consejero señaló que el presupuesto de la Junta para este año será «tremendamente restrictivo».