La Junta se escuda en la buena salud del ganado para reducir los actos clínicos

La consejera de Agricultura y Ganadería, Silvia Clemente, aseguró el pasado martes que la Junta ahorrará seis millones con la modificación introducida en la campaña ganadera. Explicó que los buenos resultados de prevalencia de algunas enfermedades, inferior al tres por ciento, le permitirá reducir a la mitad los actos clínicos. Además, recordó que los veterinarios de los servicios territoriales de la Junta llevan a cabo estos análisis, con la ayuda de empresas externas donde son necesarios.

Clemente indicó que los niveles de ejecucción de esta campaña de saneamiento son similares a los de 2010, ante las críticas de la socialista Ángel Marqués, quien denunció el retraso en el inicio de la misma y la falta de argumentos de la consejera para explicar esta «injustificable demora» que impedirá llevar a cabo las revisiones obligatorias, especialmente en áreas como la zona de Riaño declaradas de especial incidencia de brucelosis. Marqués demandó a la consejera que sean diligentes ya que, explicó, «cualquier error puede echar al traste todos los trabajos realizados en años y poner en entredicho la calidad del sector agroalimentario de la comunidad».

«La consejera, carente de argumentos, ha mentido al señalar que la comunidad está mejor que otras. No es cierto; nuestra incidencia de enfermedades infecciosas es mayor y existe un problema en el área de Riaño que ellos mismos han reconocido», subrayó Marqués para rebatir los, a su juicio, «pobres argumentos justificativos de Silvia Clemente».

Ángela Marqués destacó, en la sesión plenaria, que «es materialmente imposible que la Junta este año pueda estar desarrollando la campaña con normalidad si no ha habido ampliación de plantilla de sus servicios veterinarios oficiales ni la adjudicación a ninguna empresa externa como se venía haciendo hasta ahora». Argumentó la procuradora socialista leonesa que en la pasada legislatura, en Respuesta Parlamentaria al procurador Alfredo Villaverde, la dirección general de Producción Agropecuaria reconocía un retraso en la campaña y en mayo hablaba de un 53,4% de explotaciones revisadas de un 48,7% en el caso de las reses. Ese retraso se producía empezando la empresa a funcionar en marzo por lo que este año el número de controles no podrá alcanzar la cifra necesaria para garantizar la sanidad en las áreas de la comunidad».