Critican la falta de alternativas para facilitar agua a los vecinos

El grupo municipal popular en el Ayuntamiento de Riego de la Vega criticó ayer la actuación del equipo de gobierno ante el problema de contaminación del agua del abastecimiento en la localidad de Toral de Fondo, así como con la gestión medioambiental que ha seguido el PSOE en los últimos y, en concreto, con los vertidos del polígono industrial en la pedanía de Toralino de la Vega.

Los populares, que se ponen a disposición de los vecinos para canalizar «cuantas iniciativas y proposiciones estimen de interés» sobre el asunto, estiman que el equipo de gobierno «no se ha mostrado próximo» a los problemas de los vecinos de Toral de Fondo y Toralino y consideran que a los primeros «les ha dejado a su merced ante este grave problema, sin ofrecer alternativas como pudieran ser facilitar el agua para consumo humano», como se ha hecho en casos similares, como el de Nistal de la Vega, cuando se conoció que el pozo estaba contaminado con Arsénico. El desamparo de los vecinos de Toralino se produce por la falta de respuesta a los vertidos del polígono industrial.

«Nuestros concejales han formulado quejas reiteradamente reclamando información sobre las obras inconclusas» de la depuradora, «así como los planes de su puesta en marcha», señala el comunicado. Además el grupo municipal señala que gran parte de las empresas del Parque Empresarial de la Vía de la Plata «carecen de instalaciones de control y depuración de vertidos» y responsabilizan al alcalde, Miguel Ángel Martínez, de la situación, porque «en sus cuatro legislaturas como regidor no ha tenido la suficiente sensibilidad ni preocupación para eliminar este problema».

El PP también critica que después de 20 días sin agua en Toral aún no se ha informado a su grupo de la situación y se pone a disposición del equipo de gobierno «para analizar y aprobar medidas efectivas para erradicar el problema».

La prohibición de no consumir agua se prolongará al menos hasta el viernes, según informó ayer la Junta, que negó haber tomado muestras y explicó que la complejidad de los análisis encargados por el gestor del servicio son el motivo de la demora de los resultados.