Durán: «Hay que mantener Fonfría pero desde la legalidad»
Minas remite mañana a Europa su propuesta de restauración.
La alcaldesa de Villablino, Ana Luisa Durán.
Sobre la situación de ilegalidad en la que se encuentra Fonfría, propiedad del empresario Victorino Alonso, al tener su concesión de utilidad de suelo público caducada, según un informe de Medio Ambiente, la alcaldesa de Villablino, Ana Luisa Durán, se lamentó de que la administración haya pasado por alto hasta ahora la falta de este permiso. De todos modos, la regidora socialista espera que «todo se solucione lo antes posible para poder mantener durante un tiempo más la actividad de la mina».
En este sentido, dijo que la licencia de ocupación es complementaria al resto de los permisos, es un trámite que hay que salvar cuanto antes». Por eso, la alcaldesa se mostró firme al asentir que «hay que tratar de mantener la actividad de la mina pero siempre desde la legalidad». Por este motivo, expresó su deseo de que se resuelva la situación lo antes posible para poder cumplir con las exigencias de Europa y para poder acatar la sentencia que condena a España por los cielos abiertos.
Estudio a Europa
La Junta de Castilla y León trabaja estos días para ultimar su propuesta con la que prolongar la actividad de Fonfría durante 18 meses, en los cuales se procederá a la recuperación ambiental de las 350 hectáreas de cielo abierto de la corta lacianiega. Mañana es el último día para remitir a Europa toda la documentación exigida por el comisario de Medio Ambiente Janez Potocnik, quien el pasado mes de mayo solicitó por carta a la administración autonómica pruebas jurídicas y técnicas suficientemente sólidas que justifiquen que la restauración ambiental de la corta requiere de algún tipo de actividad ambiental. Así mismo exigía un plan de cierre gradual que especifique el tiempo necesario para llevar a cabo la restauración de la zona.
El director general de Minas, Ricardo González Mantero, explicó ayer a este periódico que «la propuesta de la Junta contiene un estudio pormenorizado de la explotación, en el que se proponen todos los movimientos de tierra necesarios para proceder a la clausura de los agujeros abiertos para la extracción de carbón». Así mismo se incluyen una serie de descripciones, aportadas por la propia empresa, «con las que reducir las perturbaciones medioambientales en la zona», como la emisión de ruido y vibraciones procedentes de las voladuras y el movimiento de maquinaria, que es lo que perturba a las especies protegidas.
Por lo que se refiere al plan de cierre de la mina, que incluye los tiempos necesarios para la restauración de la corta y las condiciones para incorporar al proyecto a los 150 trabajadores tanto de Fonfría como de Nueva Julia, González Mantero avanzó que hoy mismo formalizará su solicitud a la empresa, «que es quien tiene que presentarla». Una vez conseguida, se reenviará a la Comisión Europea.