Un incendio obliga a intervenir a seis helicópteros y dos aviones
Medio Ambiente declara el nivel 1 al afectar al bosque.
Efectivos de lucha contra el fuego, en el lugar del siniestro.
La posibilidad de que el fuego afectase a una extensión superior a 30 hectáreas de arbolado motivó ayer que la Consejería de Fomento y Medio Ambiente decretase el nivel 1 de alerta en un incendio que se declaró sobre las dos de la tarde, posiblemente de origen intencionado y que puso en guardia los vecinos de Pardavé, en el municipio de Matallana de Torío.
Y no era para menos, porque la columna de humo se divisaba desde varios kilómetros a la redonda y por la cantidad de medios que se utilizaron para la extinción de las llamas, tanto de la Junta de Castilla y León como del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, con base en León y otras provincias.
Un helicóptero de coordinación dirigió las operaciones de otros cinco de extinción y de dos aviones anfibios. Además, participaron en los trabajos tres brigadas aerotransportadas, otras dos de tierra, dos autobombas y dos buldocers.
Las llamas afectaron a una masa forestal formada por monte bajo, roble y algo de pino, en un fuego que se produjo en el paraje conocido como Caraveo.
Los vecinos de Pardavé se sumaron a los trabajos de extinción al temer que las llamas se acercaran al pueblo y arruinasen pastos y colmenares.
Se desconoce si este siniestro guarda alguna relación con el que se declaró minutos antes en Castrillino (Villaquilambre), al estar separadas ambas localidades por una distancia menor a los 20 kilómetros y emplazadas en la misma carretera (LE-331).
Ayer continuaba activo el incendio de Piedrafita (Cámenes, y el de Villabandín (Murias de Paredes), que comenzaron el domingo. En esta última localidad se controló ayer otro siniestro, que ha quemado 4 hectáreas.