Babia registra un terremoto de 3,3 grados aunque no causa ningún daño
Un terremoto de 3,3 grados de intensidad se dejó notar ayer en los términos municipales de Cabrillanes y Riolago de Babia aunque el temblor no dejó ningún daño material, ni personal. De hecho el suceso de carácter leve fue percibido de manera desigual por los habitantes de la zona donde no todos se percataron del seísmo.
Según fuentes consultadas por este periódico un vecino alertó a las 18.40 horas al 112 de lo sucedido, quien puso en conocimiento de la Guardia Civil del puesto de Villablino lo ocurrido. De hecho, según corroboraron una patrulla recorrió la zona tras ser alertados del terremoto. No obstante, tras recibir la alerta el servicio de emergencias comprobó que no existía ninguna incidencia en las zonas afectadas por el movimiento. A última hora de ayer aún se desconocía la profundidad del terremoto.
Percepción desigual
Varios vecinos apuntaron que percibieron el temblor pasadas las seis y media de la tarde. «Apenas duró unos segundos pero sentimos crujir las vigas de madera del tejado», apuntó un testigo de Riolago, quien confirmó que «sin embargo, otros familiares que estaban en el jardín no se percataron».
Situaciones similares se vivieron en Cabrillanes, aunque no todos los vecinos asociaron el temblor con un terremoto, así lo confirmó el testimonio de una vecina quien apuntó que «estaba sentada en una silla y sentí vibrar el suelo, pero nunca pensé que fuera un seísmo». De hecho, no todos los habitantes se percataron del temblor, «muchos se enteraron al oír el comentario», corroboraron desde el bar.