El Ayuntamiento cierra la guardería porque no puede soportar su coste

El pleno del Ayuntamiento de Cistierna acordó el pasado jueves cerrar el centro de educación infantil municipal por el elevado coste que supone su mantenimiento para las arcas municipales, especialmente desde que hace más de un año la Junta de Castilla y León dejara de subvencionar a estos centros. Las pérdidas anuales del centro, que cuenta con 41 plazas, se sitúan por encima de los 80.000 euros. A esto hay que unir que sólo se han cubierto siete plazas y lo que no aporta la Junta, es decir, un tercio del coste de cada plaza. El coste por plaza vacía supone al Ayuntamiento de Cistierna 185 euros mensuales. El mantenimiento de esta instalación es de unos 150.000 euros anuales.

 

Rescisión

El alcalde de Cistierna, Nicanor Sen, afirmó que el centro infantil al tener una ocupación inferior al 20% hace que el mantenimiento sea muy elevado. «La adjudicataria nos ha comunicado la rescisión del contrato. El Ayuntamiento no puede continuar manteniendo un servicio con un número tan inferior de niños», aseguró Sen, quien recordó que cuando se puso en marcha este centro infantil la situación era diferente y había más niños. El alcalde recalcó que la voluntad del consistorio es continuar con este servicio como guardería a través de una cesión de las actuales instalaciones. «Es el modelo que en estos momentos más se adapta a la realidad que estamos viviendo ya que el número de niños es bajo».

Por su parte, el portavoz del PP, Fidentino Reyero, afirmó que el parecía correcto el cierre dado que es imposible mantener este centro. El concejal de la UPL-IML, Pedro Alvarado manifestó que el tiempo les ha dado la razón cuando defendía que era inviable mantener un centro infantil. «Siempre fuimos partidarios de crear una guardería en las instalaciones del colegio y no construir un centro infantil que ahora hay que cerrar por su coste elevado», criticó.

Los padres de los niños que actualmente están matriculados en el centro fueron avisados del cierre definitivo con una semana de antelación. Consideran que los culpables de esta situación son la Junta y el ayuntamiento por su «dejadez» dado que en enero «ya sabían que la Junta iba a dejar de pagar». «Podían haber iniciado los trámites para poner en marcha una guardería y no dejarnos ahora sin nada», señalaban varias madres. En estos casos, trabajan los dos progenitores por lo que se quejan de que se les ha dejado sin un servicio fundamental.