Cruz Roja garantiza la teleasistencia pero ignora quién pondrá el 65% estatal
De Luis afirma que entidades y Diputación buscan fórmulas para mantener el servicio.
Este servicio llega a más de 4.200 personas mayores de toda la provincia de León.
El presidente de Cruz Roja en León, José Ignacio de Luis, y la presidenta de la Diputación de León, Isabel Carrasco, se reunirán la semana que viene para tratar de buscar una solución a los problemas de financiación que en estos momentos pesa sobre el servicio de teleasistencia a domicilio, cuyo contrato de adjudicación finaliza el próximo 31 de diciembre. Este servicio, prestado por Cruz Roja a cerca de 4.200 usuarios de la provincia, a través de distintos contratos con los Ayuntamientos de León, Ponferrada, San Andrés del Rabanedo y la Diputación de León, dejará de contar a partir de ahora con la financiación del Gobierno central, que a través del Imserso, aportaba el 65% del millón de euros que supone al año su puesta en marcha.
A partir de ahora, serán las entidades locales y la Diputación de León los que sufraguen en solitario este servicio, para el que tampoco se descarta buscar financiación autonómica.
Cruz Roja ya ha mantenido los primeros encuentros con los ayuntamientos de León, Ponferrada y San Andrés del Rabanedo, y el resultado ha sido «muy satisfactorio», según su presidente, José Ignacio de Luis, que aseguró que es voluntad de todos ellos seguir prestando este servicio, sin que se registre un incremento en el coste para los usuarios. Es más, de Luis garantiza que la teleasistencia se seguirá prestando más allá del 31 de diciembre, hasta que se formalice el siguiente contrato de adjudicación, lo que también es una garantía para los 30 trabajadores que emplea este servicio.
La Diputación de León también confirmó ayer que seguirá apostando por este servicio, a pesar de que la administración central haya cortado el grifo de su financiación. Por eso, la institución provincial está trabajando en la elaboración del primer Plan Provincial de Servicios Sociales, que nace con el fin de mejorar y optimizar tanto la calidad del servicio como los recursos que se utilizan para ofrecerlo.
Sobre la posibilidad de que la Junta de Castilla y León financie esta atención a domicilio, como hace con otros servicios sociales, la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades de la Junta de Castilla y León, Milagros Marcos, se limitó el pasado lunes en Palencia a ofrecer su mediación entre Cruz Roja y las entidades locales para buscar la mejor solución al problema. En este sentido asegura que la comunidad «ha ido dando soluciones a los programas que desde el 2008 han dejado de contar con la financiación del Estado, y ha establecido criterios suficientes para seguir atendiendo a estas personas».