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La Junta y Agricultura destinarán 10 millones a la recuperación de la superficie quemada en Castrocontrigo

Esta cantidad estará financiada al 50% por cada administración y permitirá corregir la erosión, retirar restos o reforestar la zona afectada por el fuego

Tala de pinos en el bosque arrasado por el incendio.

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ICAL

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La consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta y el Ministerio de Agricultura destinarán casi 10 millones de euros -en concreto 9.773.796 financiados al 50 por ciento por cada administración-, para la restauración de la zona quemada en el incendio que el pasado verano arrasó 11.724 hectáreas de Castrocontrigo.

Esta cantidad se irá invirtiendo en diversas actuaciones como la corrección de la erosión, la retirada de restos, la reforestación, la defensa contra los incendios y las plagas forestales o la restauración de diferentes infraestructuras. Del mismo modo, también se financiarán los trabajos silvícolas de los aprovechamientos resineros.

El Ministerio aprobó una «declaración de emergencia» para la zona con el objetivo de que los trabajos se lleven a cabo cuanto antes. Su ejecución, coordinada por parte de la consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta, se encargó ya a «diversas empresas».

La primera acción financiada con esta cantidad se iniciará en la primavera de 2013, se prolongará hasta 2016, y su alcance se verá reflejado en los siguientes diez años. El objetivo es reorganizar la masa forestal, poner en marcha acciones de restauración vegetal, de corrección de erosiones y de defensa de las infraestructuras viarias. También se impulsará la recuperación de la fauna y se llevarán a cabo diferentes acciones de defensa preventiva contra los incendios forestales.

Además, desde finales del año pasado se está avanzando en el diseño de la restauración, que debe ir adecuando sus pasos a las primeras estimaciones sobre la evolución de la regeneración natural. Hasta el momento ya se han efectuado análisis sobre la cantidad de piñón presente en el suelo y su viabilidad y, aunque no se dispone de datos definitivos, se estima que podría haber «entre 70.000 y 500.000 piñones por hectárea», según las zonas, y «con porcentajes de viabilidad por encima del 80 por ciento». Este dato indica que la regeneración natural «será esencial en la mayor parte de la superficie quemada».

A lo largo del otoño también se han planificado y puesto en marcha medidas de «absoluta urgencia» en las que ha trabajado personal técnico de la consejería y de la Confederación Hidrográfica de Duero (CHD). Estas labores tuvieron como fin controlar la erosión de la zona quemada. Para ello, se elaboró una cartografía para analizar las características de la superficie y su posible regeneración, se tomaron muestras de las semillas y se analizó el tipo de propiedad de los montes.

La primera medida de cara a la restauración llegó de la mano del ‘Plan de Extracción de la Madera Quemada’, cuyo objetivo fue «evitar el riesgo de plagas y favorecer la regeneración». En noviembre se realizó la subasta conjunta y se adjudicó casi el 90 por ciento de cerca de medio millón de metros cúbicos de la madera licitada, que alcanzó un valor global de 2,2 millones de euros, (un diez por ciento más del precio de salida). Este dinero se destinó a los propietarios de los montes y, según confirmó la consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta, «en el mes de marzo estarán adjudicados todos los lotes».

1.500 hectáreas de madera retiradas

A finales de 2012 también se iniciaron los trabajos de extracción de la madera quemada, habiéndose apeado y extraído el 20 por ciento del total. Así, se han retirado unas 1.500 hectáreas de madera. En estos momentos trabajan en la zona casi 100 máquinas y vehículos, en concreto, 20 procesadoras encargadas de cortar, desramar y tronzar la madera, 18 autocargadores encargados de la extracción y 60 camiones que diariamente salen de la zona a los centros de transformación o distribución, algunos situados en Cantabria, Soria o Galicia.

Una de las medidas más urgentes acometidas en la zona del incendio es el control de plagas y contra el riesgo de erosión. Esta actuación cuenta con una inversión de 700.000 euros y ha permitido la instalación de 51 albarradas vegetales de hasta 1,2 metros de altura y diferentes anchuras.

Además, se han colocado 15.000 plantas de vegetación de ribera autóctona de tamaños entre 1,5 y tres metros de altura en más de 20 hectáreas. También se llevó a cabo una limpieza y eliminación de coníferas y preparación y mejora de robles y sauces en unas 30 hectáreas.

El incendio

El incendio de Castrocontrigo, de carácter intencionado, se inició el pasado 19 de agosto. En él participaron más de 1.000 efectivos de la Junta de Castilla y León, el Ministerio, la UME, la Guardia Civil y la Diputación de León, además de una buena parte de la población de los municipios afectados.

Las llamas afectaron a los municipios de Castrocontrigo, Luyego, Quintana y Congosto, Destriana y Castrillo de la Valduerna y a las 13 juntas vecinales. El fuego se dio por controlado el 28 de agosto y se extinguió el 6 de septiembre.

El incendio tuvo como consecuencia la quema de una superficie total de 11.724 hectáreas, de las cuales 10.555 (el 90 por ciento) corresponden a arbolado y el resto, 1.169, eran de matorral y pastos, fundamentalmente. Del total de superficie, 8.153 hectáreas (el 69,5 por ciento) corresponden a montes de utilidad pública y contienen la gran mayoría de la madera quemada

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