El Común solicita que los ayuntamientos regulen el uso de las zonas de baño en los ríos
Unos niños se preparan para darse un chapuzón.
Teniendo en cuenta los accidentes graves e incluso mortales que se producen cada año en las zonas de baño situadas en los entornos naturales, el Procurador del Común de Castilla y León ha iniciado una actuación de oficio con el objetivo de conocer la situación sanitaria y de seguridad que ofrecen estos espacios. Para alcanzar un mayor control y ofrecer más garantías a los ciudadanos, esta institución recomienda a los municipios que regulen mediante ordenanzas el uso de aquellas zonas situadas en la naturaleza a las que acuden los bañistas.
El informe del Procurador recoge que los ayuntamientos o las entidades locales menores también deberían solicitar la inclusión de ese lugar en el censo oficial de zonas de baño, garantizando de así su control sanitario.
Para la temporada de 2013, que comienza el día 15, este censo incluye 28 zonas naturales de las que cinco están en León. Un listado incompleto, ya que la institución constanta la existencia de numerosas zonas de baño con una «relativa afluencia» y que no forman parte del registro oficial porque las administraciones locales no lo han solicitado. Por ello, en sus aguas no se realizan controles sanitarios.
Además, el Común señala que «en alguna de estas zonas se han producido accidentes graves e incluso mortales», pese a que éstos también suceden en los espacios controlados, donde en 2012 «se produjeron dos fallecimientos» de los seis que se registraon por estas causas.