Homenaje en pólvora para los caídos
La ciudad recuerda a los soldados que perdieron la vida en la batalla de Rioseco.
Los soldados también desfilaron para conmemorar la gesta maragata.
Fiel a su costumbre de homenajear las gestas de sus antepasados, la ciudad de Astorga recordó ayer a los denominados 800 de Clavijo, nombre con el que se conoce al batallón de soldados maragatos que participó en la batalla de Medina de Rioseco librada en 1808, en el marco de la Guerra de la Independencia. Los soldados maragatos pidieron permiso a las autoridades de la ciudad para portar la bandera de Clavijo como estandarte, sobre el que juraron su defensa, y así fue, ya que, aunque vencidos, los soldados volvieron a Astorga con su bandera, la misma que hoy en día preside el despacho de la alcaldesa de la ciudad.
La Asociación Histórico Cultural de Voluntarios de León ha sido la encargada de rememorar esta gesta, con la recreación de un capitulo de la contienda en forma de disparos al aire. Con este acto se intenta homenajear a los soldados maragatos que perdieron su vida en esta gesta y a los que volvieron de la batalla como héroes, con la bandera de Clavijo como seña de identidad y como prueba de la valentía con la que se enfrentaron a los franceses.
El acto comenzó al caer la tarde, a eso de las 20.30 horas con la salida del cortejo y con media docena de soldados del Batallón Clavijo, tambor batiente y con el pendón de Clavijo. Con el se recorre la Plaza Mayor, Plaza General Santocildes, Calle Lorenzo Segura, Plaza Obispo Alcolea y Calle Enfermeras Mártires de Somiedo). El cortejo llega media hora más tarde ante la placa del batallón Clavijo en la Calle Mártires de Somiedo, donde tiene lugar una presentación de armas, la lectura de un texto histórico y la colocación de la corona de laurel.
Más tarde, los soldados regresan al Ayuntamiento para depositar el pendón de Clavijo en el consistorio donde seguirá representando este capitulo de la historia de Astorga hasta el año que viene.