villablino
Dos camioneros resultan heridos en un forcejeo con un piquete que les dió el alto
Los transportistas llevaban carbón de importación desde El Musel hasta Anllares.
Uno de los camiones dañados en el enfrentamiento, con el parabrisas roto.
Dos transportistas de carbón de importación resultaron heridos ayer en un enfrentamiento con un piquete que interrumpió el paso de los camiones y basculó su carga para verterla sobre la vía. El incidente tuvo lugar poco antes de las ocho de la mañana en la CL-626, que une Villablino con León, concretamente en la avenida de Asturias de la capital lacianiega, cuando el grupo de manifestantes dio el alto a los vehículos procedentes de Asturias, que transportaban el mineral a la central térmica de Anllares, en El Bierzo.
El enfrentamiento produjo un forcejeo entre el piquete y los conductores, que sufrieron heridas leves fueron trasladados al centro socio-sanitario de Villablino. Los camiones también resultaron dañados, con las lunas rotas y el carbón vertido en la vía.
El suceso interrumpió el tráfico durante tres horas y se restableció después de que todo el mineral basculado fuera devuelto a los camiones. Los vehículos retomaron el viaje hacia las 11.00 horas y fueron escoltados por las fuerzas de seguridad hasta su destino.
Investigación
Los responsables de los hechos no han sido aún identificados ya que los agentes de la Guardia Civil llegaron al lugar del incidente cuando ya se habían marchado, aunque, según señalan fuentes de la Subdelegación del Gobierno, ya se han abierto las diligencias oportunas para identificar a los culpables y esclarecer los hechos.
El suceso es un reflejo del clima de tensión que se vive en la cuenca, con la situación generada por la falta de indefinición del futuro del sector, principal medio de vida en la comarca de Laciana.
El comité de empresa de Coto Minero Cantábrico, empresa que actualmente se encuentra en concurso de acreedores, se pronunció ayer sobre el incidente y se desmarcó de este tipo de actuaciones condenando cualquier tipo de violencia. Fuentes del colectivo señalaron ayer que las causas se pueden buscar en la «difícil situación que viven las comarcas mineras, ya que el carbón de importación se está quemando en las térmicas, mientras que el mineral nacional todavía está a la espera de conocer su futuro».
Por su parte, la alcaldesa de Villablino, Ana Luisa Durán, también se sumó a la condena y aseguró que la violencia «no es la solución». Durán destacó que «hay un problema laboral» por lo que «la gente está desesperada».
El otro colectivo implicado también se pronunció ayer condenando los hechos. La Asociación de Empresarios del Transporte y Aparcamiento de Asturias (Asetra) pidió amparo a la Delegación del Gobierno de Castilla y León, a fin de evitar que se repitan estos incidentes.
En una nota, la asociación asegura que entiende la situación de los mineros y sus familias en Asturias y en León, pero pide la misma «comprensión para que los trabajadores y pequeñas empresas puedan realizar su trabajo diario, igualmente escaso y con dificultades económicas de todo tipo».
Según la asociación, los vehículos interceptados procedían del Puerto del Musel, de Gijón, e iban cargados de carbón, para ir a las centrales térmicas de La Robla, Compostilla y Anllares
El colectivo recuerda que los camioneros que hacen esta ruta «son más vulnerables» que los convoyes de los trenes.