Las obras para vallar el parque público darán comienzo en septiembre
La playa fluvial es uno de los grandes reclamos turísticos.
El principal atractivo turístico de Cimanes del Tejar, su parque público, será vallado a partir del próximo mes de septiembre «para aumentar la seguridad y mejorar las instalaciones», señaló ayer a este periódico el alcalde, Genaro Martínez.
Con una extensión de más de dos hectáreas, la instalación cuenta con amplias zonas de recreo y merenderos junto al río Órbigo, canchas deportivas que albergan una bolera cubierta de bolos leoneses, frontón, campo de fútbol, pista deportiva y piscina, pero sobre todo la gran joya de la corona, una playa fluvial de 3.000 metros cuadrados «que algunos domingos de este verano ha recibido la visita de 2.000 personas», remarca el regidor.
Pero aunque se presenta como el reclamo más importante, no es el único capaz de atraer público. Y es que este municipio situado a 26 kilómetros de la capital leonesa —al que bañan las aguas del Órbigo— ofrece un escenario único para la pesca o el senderismo, entre otras cosas.
Parte del patrimonio
Mención aparte merecen sus embutidos y de visita obligada se antojan las iglesias de Azadón, Secarejo, Villarroquel y Velilla, esta última conserva una interesante portada de sillería barroca.
Viviendas tradicionales, tres molinos harineros bien conservados y un amplio patrimonio cultural completan un abanico de posibilidades listo para contemplarse en cualquier época del año.