Las empresas prevén reducir un 3% el empleo propio y un 21% las contratas
La mayor parte de las plantillas propias de las mineras trabaja en interior.
Las empresas privadas de la minería del carbón prevén mantener su nivel de producción actual (incluso un poco más alta en algunos casos si se normaliza la situación) hasta finales del 2018, cuando concluye el Nuevo Marco de Actuación para la Minería del Carbón que sindicatos y Ministerio de Industria pretenden cerrar esta misma semana. Sin embargo, sus plantillas se verán reducidas de media un 11%. Un ajuste mayor tendrá la empresa pública Hunosa, que perderá algo más del 20% de sus trabajadores actuales, hasta quedar por debajo de los 1.700 en la plantilla.
En total el sector perderá un 15% de los 4.894 trabajadores que desarrollan su actividad para las quince empresas en funcionamiento, la mayor parte de ellos de las sociedades contratadas para realizar tareas específicas por las sociedades mineras.
Según el plan entregado por las empresas al ministerio, las plantillas propias se reducirán en menos de un 3%, hasta los 3.318 trabajadores (unos 400 menos que los actuales) y las subcontratadas en un 21,3%, más de 300 trabajadores, hasta quedar en menos de 1.200.
El propio ministerio reconoce en su borrador que la aplicación de las prejubilaciones es complicada si se tiene en cuenta que las plantillas son jóvenes, debido a la aplicación de este sistema en los planes del carbón anteriores. Las últimas bajas por esta vía se produjeron el pasado mes de diciembre.
Las condiciones en las que abandonará el empleo estos trabajadores son el fleco que tiene que cerrar el secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, porque los sindicatos no admiten ya otro interlocutor para seguir negociando sin capacidad de decisión.
El pasado jueves la parte social y el Instituto del Carbón acercaron posturas hasta donde pudieron sobre las bajas incentivadas, pero finalmente decidieron prescindir del encuentro del viernes y esperar una convocatoria oficial de Nadal para cerrar un marco de actuación que por lo demás está pactado.
Las empresas ya aceptaron el ultimatum del Gobierno sobre las ayudas de 30 euros por tonelada de carbón de interior, que se irán reduciendo en cinco euros al año; mientras las de cielo abierto recibirán una pequeña ayuda (de un euro y 50 céntimos) este año y el que viene, porque a partir de ahí Industria entiende que llegan al umbral de rentabilidad.
Las empresas enviaron a principios de este mes sus previsiones de producción y plantillas al ministerio, pero estas no han variado sobre la propuesta anterior. Sobreviven 15 empresas (una de las leonesas, Carbones de Arlanza, se da dos años más para seguir abierta), que mantienen 24 unidades de producción. Algunas de ellas se encuentran en proceso concursal, las de Victorino Alonso y también la de Alto Bierzo, del Grupo Viloria.
A finales del 2012 la plantilla propia de estas empresas era de 3.407 personas, de las que 1.603 son de Hunosa y 1.804 de las privadas. De ellos, 1.364 trabajan en interior y 440 en las de cielo abierto.
Por lo que se refiere a las subcontratas, suman 1.487 trabajadores al servicio de estas empresas mineras, de las que 168 están en Hunosa y 1.319 en las empresas privadas. De ellos 425 son de interior y 894 trabajan en los cielos abiertos.
Las previsiones de las empresas pasan por mantener sus niveles actuales de producción, algo que parace complejo con la actual situación de alguna de las compañías y con las restricciones presupuestarias en las que insiste el ministro Soria.