Riego de la Vega
Adjudican en 1,5 millones la Edar que dará servicio al polígono industrial
La depuradora eliminará el problema del vertido en un cauce para uso agrícola.
Las aguas sin tratar se vierten junto a un molino de Toralino de la Vega.
Los problemas ambientales que genera la falta de tratamiento de las aguas residuales de Riego de la Vega y del Parque Empresarial de la Vía de la Plata, situado en este municipio, se encuentran más cerca de su solución con la adjudicación de las obras de la estación depuradora de aguas residuales (Edar). El proyecto, licitado en 2.356.392,49 euros, lo ejecutará la unión temporal de empresas (UTE) Asteisa Tratamiento de Aguas, S.A.U.-Contratas y Obras Enricar, S.L., por un importe de 1.556.191,60 euros, IVA incluido.
La oferta económica ha sido el criterio que más ha pesado en la adjudicación, que aún no se ha elevado a definitiva, en un concurso público al que han concurrido 31 empresas, con una puntuación muy igualada en lo que aumento de los plazos de explotación y garantía se refiere —la mayor parte de las ofertas alcanzaban la máxima puntuación—. Las diferencias han sido más amplias en la propuesta técnica, aunque ésta sólo no alcanzaba una cuarta parte de la puntuación total obtenida.
La adjudicación precisa ahora elevarse a definitiva para la firma del contrato entre la Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente (Somacyl) —que depende de la Junta de Castilla y León— y la UTE. A partir de entonces, la contratista tendrá un plazo de diez meses para acabar la Edar, por lo que la instalación podría estar terminada y entrar en funcionamiento antes de que termine el 2014.
Después de que el Ayuntamiento de Riego de la Vega acometiera varias fases de la depuradora, valoradas en medio millón de euros, y tras llegarse a un punto de bloqueo ante los problemas de financiación, ha sido un acuerdo con los empresarios del Parque Empresarial de la Vía de la Plata, situado en las localidades de Toralino y Riego, el que ha permitido la puesta en marcha del proyecto. Las 35 empresas del polígono industrial ,que emplean a unos 450 trabajadores, aportarán un 57% de la inversión, mientras que la Junta y el Ayuntamiento de Riego asumen el resto. La Administración autonómica dispondrá del Fondo de Cohesión de la Unión Europea para financiar su contribución, de alrededor de medio millón.
El problema ambiental que genera el vertido de Riego de la Vega y Toralino se debe a que éste finaliza en un cauce que aprovecha la Presa de los Tres Concejos para el riego de los cultivos de la zona. Además de las molestias a los agricultores, el paso del cauce por la localidad de Santibáñez de la Isla (municipio de Santa María de la Isla) generaba protestas en el pueblo ya en el año 2002. Finalmente, el vertido terminaba en el río Tuerto.
La Confederación Hidrográfica del Duero expedientó y sancionó al Ayuntamiento de Riego de la Vega por superar el vertido que había autorizado al canal de riego. El agua que salga de la Edar terminará en el mismo punto de vertido, aunque deberá cumplir las condiciones de calidad para que los agricultores puedan aprovecharla.