Un sacerdote leonés muere asesinado a golpes en Panamá para robarle
Tres individuos han sido detenidos por el crimen del cura, natural de Polvoredo.
Tres personas se encuentran detenidas, entre ellas la empleada doméstica y su esposo, tras el crimen del sacerdote leonés, Aníbal Gómez que apareció muerto en la residencia del obispo emérito, Carlos María Áriz en la provincia de Colón, según informa medios periodísticos panameños. El religioso, de 67 años, natural de Polvoredo, murió el pasado miércoles a causa de los golpes y de varias puñaladas que recibió en el domicilio del obispo, en el residencial José Dominador Bazán en la antigua base norteamericana de David. La policía está segura que el móvil fue el robo.
Los familiares leoneses del religioso se han vistos sorprendidos por la trágica noticia ya que el sacerdote, que llevaba muchos años en Panamá, nunca les indicó que la zona fuese peligrosa. «Nunca dijo que fuese un lugar inseguro. Todo lo contrario de cuando estuvo en Colombia que la zona era más problemática», señala su sobrino Fernando. El cuerpo de sacerdote será incinerado y será repatriado para España aunque los familiares no ha determinado si será enterrado en León o en Asturias donde residen sus familiares.
Durante la investigación, la policía panameña interrogó a la doméstica, al esposo y a una tercera persona, de la cual no se han ofrecido datos personales. El arzobispo metropolitano, José Domingo Ulloa exigió una rápida investigación, recomendó a los asesinos el arrepentimiento y llamó a recuperar la cultura de la paz y la vida.
El asesinato del sacerdote leonés ha causado una gran consternación en Lario y Polvoredo dado que era natural de Polvoredo y que pasaba los veranos en la casa que tiene sus familia en Lario. La gente aún no es capaz de creerse lo que ha sucedido ya que dicen que era una «muy buena persona». Además lo que no se explican es que haya sido un asesinato.
El cura, de 67 años, fue encontrado amarrado y con golpes en su cuerpo en la residencia del obispo emérito de esa ciudad atlántica panameña y Guna Yala, Carlos María Áriz, también de origen español. El sacerdote fue hallado por una empleada, quien al escuchar los gritos de auxilio del prelado acudió a ver lo que pasaba y también fue golpeada, a resultas de lo cual quedó inconsciente. Los medios locales panameños han destacado que Gómez hacia más de 20 años que vivía en Panamá, oficiaba la misa en la iglesia de Davis, en las afueras de Colón, y fue director de la católica Academia Santa María, en la misma ciudad.