Los ganaderos de Pinos denuncian el «acoso» de los guardas de Mieres
Asturias vigila la zona para que las reses leonesas no «expriman» los pastos.
Los ganaderos leoneses tiene derecho a pastar en el puerto todo el año.
La asociación Montaña de Babia y Luna ha denunciado la campaña orquestada desde el Ayuntamiento de Mieres que consiste en imponer la presencia de dos guardas en el puerto de Pinos para evitar que el ganado procedente de León «exprima» los pastos antes que el ganado asturiano, según avanzó el rotativo asturiano de la Nueva España. Para la asociación «se trata de una maniobra más del Ayuntamiento de Mieres para gestionar sus competencias públicas dentro del territorio de Castilla y León, sin que ninguna administración ponga remedio a ello», denuncian a través de una nota de prensa remitida ayer.
Para el colectivo, es «especialmente grave» el nuevo servicio que pondrá en marcha el Consistorio asturiano con sus guardas, un servicio de guardería que estará activo «desde el mes de marzo» a pesar de que la temporada arranca «a principios de junio».
Por eso aseguran que la presencia de estos dos guardas «sólo servirá para acosar a los ganaderos de Babia que tienen derecho a pastar todo el año por el puerto».
Por ello, la asociación informará a los ganaderos de Babia y a las juntas vecinales de las vías que se tiene previsto adoptar para defender los derechos e intereses económicos de esta comarca leonesa.
Igualmente, se anunció la intención de denunciar este nuevo hecho ante la Consejería de Presidencia de la Junta de Castilla y León para que se proceda «de una vez por todas» a impedir que una administración asturiana pueda ejercer competencias de carácter público «dentro de casa», exigiendo el inicio del procedimiento de expropiación forzosa que ya se prometió en el año 2006.
La propia consejera de Agricultura, Silvia Clemente, reconoció hace siete meses en una entrevista publicada en Diario de León que el Ayuntamiento de Mieres, propietario de 900 hectáreas repartidas en varias fincas, ejerce competencias impropias al regular los pastos en beneficio de sus ganaderos, y aseguró que las competencias para evitarlo las tenía que ejercer San Emiliano a través de una ordenanza.