La marcha de Cañete bloquea la negociación del tarifazo

Si los regantes han conseguido el triunfo en uno de los frentes abiertos para esta campaña, el del IBI de los pantanos en la cuenca del Duero, no parece que logren romper las líneas de la Administración del Estado en lo que al «tarifazo eléctrico» se refiere, según indicó el presidente de la Asociación de Comunidades de Regantes de la Cuenca del Duero (Ferduero), Ángel González Quintanilla.

Contar con el apoyo del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medioambiente (Magrama) no es suficiente dada la interinidad de su máximo responsable, Miguel Arias Cañete, que deja el Magrama al encabezar la lista del Partido Popular al Parlamento Europeo, más aún si el titular de Industria, José Manuel Soria, se muestra inflexible en lo que se refiere a una negociación con la Federación Nacional de Comunidades de Regantes de España (Fenacore), expuso Quintanilla, miembro de la directiva de ésta como representante de los regantes del Duero.

«El Ministerio de Agricultura nos ha manifestado su apoyo, pero Soria no quiere saber nada y estamos a la espera de que se nombre al sustituto de Arias Cañete», explicó ayer Quintanilla, que ve la solución al precio de los peajes de potencia en el mismo punto muerto que las quinielas sobre quién será el elegido por Rajoy para recoger la cartera vacante. «Mientras no se nombre ministro aquí no hay quien dé un paso», aseguró.

La defensa que realizó el ahora candidato popular en sede parlamentaria el 19 de marzo en defensa de los regantes, con un consumo eléctrico de temporada, quedan, al menos de momento, para las actas del Congreso, «por mucho que digan que el presidente del Gobierno nos apoya. Si así fuera, ya haría Soria por poner remedio a la situación», apuntó el presidente de Ferduero.

Los regantes, en pie de guerra desde el 2008, cuando se suprimió la tarifa especial, insisten en que no pueden pagar por una potencia que sólo necesitan en los meses de campaña —abril a septiembre incluidos—, mientras que el resto del año les basta con lo que precisa un hogar para el mantenimiento de las estaciones de bombeo. Desde entonces, los regantes leoneses afrontan un sobrecoste en la factura energética de 8 millones de euros anuales por el continuo encarecimiento del recibo, especialmente fuerte con la subida del pasado mes de agosto, que supuso incrementos del 110%.

Las peticiones

Las comunidades solicitan una reducción del IVA que se aplica a su factura de la luz, así como la posibilidad de realizar contratos de temporada sin penalización, con el fin de ajustar la potencia a las necesidades de cada época del año, o bien que la legislación contemple la posibilidad de realizar dos contratos anuales. También se propone la producción de energía para autoconsumo allí donde resulte viable, aprovechando los recursos de cada zona regable.

En febrero, los agricultores de las zonas modernizadas se manifestaron en sus cuencas para exigir una solución. Ya entonces se planteó la posibilidad de organizar una manifestación en Madrid del segundo sector en consumo energético después del Adif.