El Seprona desarticula una red de robo y sacrificio irregular de ganado
La operación Leoxato se inició tras la desaparición de numerosas reses en Omaña.
Distinta documentación supuestamente falsificada y material encontrados en los registros en dos domicilios.
El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil ha desarticulado una organización dedicada al robo y sacrificio irregular de ganado con destino al consumo humano que operaba en varias provincias. La investigación se inició en noviembre, cuando se denunció la desaparición de numerosas cabezas de ganado bovino en la comarca de Omaña. La investigación, denominada operación Leoxato, dio como resultado la detección de un grupo de personas que, al igual que los cuatreros, hurtaba el ganado, falsificaba la documentación de las reses e introducía su carne en los canales de distribución en el otros países.
En total, el Seprona ha arrestado o imputado a 20 personas: 1 en León, 7 en Asturias, 4 en Pontevedra, 1 en Orense, 2 en Valladolid, 2 en Zamora, 1 en Palencia y 2 en Madrid. Además se han realizado 14 registros e inspecciones en 9 explotaciones de ganado, tres mataderos y dos domicilios.
La organización robaba los animales para, después cambiar los crotales y chips que identifican a cada cabeza de ganado, según dispone la normativa. También falsifican las guías de origen y sanidad necesarias para trasladar el ganado a otras explotaciones o a los mataderos utilizando un sello veterinario. Estos procedimientos ocultaban la ilegalidad de las operaciones y hacían «muy difícil» detectar el robo y el fraude en controles de carretera y en las ganaderías que colaboraban. Además, los cuatreros contaban con el apoyo de algunos responsables y empleados de mataderos donde se sacrificaban los animales incluso si proceder el protocolo establecido legalmente, de manera que a los hurtos y falsificaciones de identificación y documentos se une otro fraude en los sacrificios de muchas de las reses sustraídas, en lo que se refiere a la trazabilidad alimentaria.
En los mataderos
Los cómplices en los mataderos permitían a la organización recuperar los crotales y chips de identificación para reutilizarlas en las reses que conseguían en posteriores robos. De esta manera, «han aparecido varios animales a lo largo del territorio nacional que, aun estando vivos, figuran como sacrificados en uno de los mataderos investigados», explica en una nota la Guardia Civil, que ha comprobado que la carne se vendía en «otros países».
La Guardia Civil no ha cerrado la operación, dirigida por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Villablino, por lo que no se descartan nuevos registros o imputaciones.