FERIA DEL AJO DE VEGUELLINA
Las ristras lucen en el Carmen
Más de 200 expositores y 20.000 visitantes invadieron las calles de Veguellina con motivo de la 25 edición de la Feria Agroganadera y del Ajo en un día soleado.
Compradores y curiosos se dan cita en la Feria del Ajo de Veguellina, que cumple sus bodas de plata.
Veguellina de Órbigo acogió ayer, coincidiendo con la festividad del Carmen, la vigésimoquinta edición de la popular Feria Agroganadera y del Ajo. En esta ocasión, el número de puestos dedicados exclusivamente al producto estrella superó todas las expectativas. Fueron un total de 58 stands para la venta de ajos, 50 para artesanía, 35 para ropa y alimentación y alrededor de otros 50 para la venta de productos varios. Es decir, más de 200 expositores se instalaron durante los más de tres kilómetros de recorrido entre las calles de Pío de Cela y La Bañeza. «La feria ha sido un éxito. Contamos con más puestos que nunca y se han superado todas las expectativas», afirmó María Estrella Fernández, alcaldesa de Villarejo de Órbigo, contenta con la buena acogida que tuvo la muestra.
La mayoría de comerciantes de ajos pertenecían a Villares y Veguellina, aunque para esta ocasión, se sumaron vendedores de Asturias, Palencia, Andalucía y País Vasco, entre otros.
Gracias a la fama de la muestra, que cada año acoge a un mayor número de visitantes, y a las altas temperaturas del día de ayer, por la feria desfilaron más de 20.000 personas que, además de visitar los expositores y comprar ajos y otros productos, pudieron degustar platos típicos de la zona como embutidos, pulpo, dulces o escabeche.
El mercado abrió sus puertas a las 10.00 horas de la mañana y a las 13.00 horas tuvo lugar la recepción por parte de las autorirades y su posterior visita a los puestos. La alcaldesa se encontraba acompañada por diputados, concejales y alcaldes de todos los puntos de la provincia.
El habitual concurso de ristras de ajo, que se desarrolló a lo largo de la mañana en el stand del Ayuntamiento, contó con la participación de 19 ristras y más de cien votantes. La ristra ganadora fue la de Carmen Trigal, que fue galardonada con un diploma y un cheque de 120 euros. El segundo y tercer premio, de 90 y 60 euros respectivamente, fueron entregados a Ezequiel Artiaga. Tras la entrega de los premios, la alcaldesa y las autoridades volvieron a dar una vuelta por el mercado y acudieron a un vino, al que estaban invitados todos aquellos que se habían desplazado hasta la localidad.
«La feria todos los años es un éxito. Es un evento que los abuelos ya reconocieron en su momento y los nietos deberían seguir haciéndolo ya que es una tradición que se debe conservar» comenta Luis Franco, vecino de la comarca que cada año acude a la cita.Como novedad para esta edición, se produjo a una exhibición de cómo se elabora un ristra de ajos, que enriqueció aún más la feria.
Del punto final a esta jornada se encargó la Orquesta Anaconda, que puso el broche musical a esta feria que se ha convertido en una de las más conocidas y populares de la provincia.