Los expertos sitúan a Picos como el mejor paraje europeo para ver lobos

Las montañas de Picos de Europa son el mejor paraje de Europa para observar lobos. Así lo manifestó ayer en Riaño uno de los organizadores de las jornadas Wolf&Bio, que reúnen a varios expertos en el mundo del lobo y del turismo de naturaleza durante este fin de semana en Riaño. Iñaki Reyero, de WildWatching Spain, aseguró también que estas jornadas pretenden acentuar la promoción del turismo de naturaleza en la comarca de Riaño. «La posibilidad de observar lobos en libertad en la comarca de Riaño se ve en muy pocos lugares del mundo. Hay cinco millones de británicos que se desplazan por todo el planeta para ver fauna», señaló Reyero, quien precisó que estas montañas son actualmente el mejor lugar de Europa para observar lobos. «Creemos que en este sentido, Riaño va a ser una de las grandes mecas del mundo para el turismo de naturaleza».

Las jornadas comenzaron con la intervención del alcalde de Riaño, Javier Fernández, ante un auditorio de unas 200 personas llegadas de todo el país. El encuentro, organizado por WildWatching Spain y la Asociación Española de Fotógrafos de Naturaleza, contó también con la presentación de Eugenio García-Rojo, del proyecto Trino/Wolf, quien repasó el trabajo que desde hace años se hace para fomentar la convivencia con el cánido. Según explicó, «el proyecto fue fruto en Castilla y León de diecisiete pactos locales que permitieron en una misma reunión meter a ganaderos, cazadores, agricultores y asociaciones conservacionistas. Esto ha tenido su mérito».

Las jornadas apuestan por la relevancia de crear foros de debate para intentar solucionar el «problema del lobo» que, al final, no lo es tanto ya que, según Reyero, en la reserva de caza de Picos se pagaron entre 2003 y 2007 67.000 euros en daños del lobo. En este periodo, se abonaron 610.000 euros por los daños producidos por ciervos y jabalíes a pastos. Sin embargo, «no existe esa percepción de que el ciervo o el jabalí sean enemigos públicos». No obstante, para Reyero, no se puede pasar de puntillas por el problema. «Hay que buscar entre todos una solución definitiva. No puede ser tan difícil», añadió, y apostó, por ejemplo, por agilizar el pago de las indemnizaciones.