Dos centros de salud se quedan sin calefacción en un Bierzo congelado
El hielo fue el principal problema en la red viaria berciana.
La nieve, y sobre todo el hielo, provocaron que a lo largo de buena parte de la mañana de este lunes las cunetas de la red viaria del Bierzo pasasen a formar parte de la calzada. No pocos vehículos finalizaron más allá de los arcenes tras patinar. Especialmente complicada resultó la circulación por los viales del Alto Sil. Así en varios puntos de la LE-715 se produjeron en las primeras horas del día varias salidas de pista, entre ellas la del autobús de la línea de Lillo del Bierzo a la capital comarcal.
La falta de previsión dejó sin calefacción, según los representantes de los trabajadores, al centros de salud de Picotuerto, en Ponferrada, y al de Cacabelos, al agotarse el gasóleo.
La llegada de las primeras nieves provocó que no pocos bercianos acudieran el domingo tanto al Morredero como al Cebrero. En ambos casos, la falta de previsión de los conductores, que en muchos casos no portaban las cadenas aconsejadas, provocó el colapso en la bajada de estas dos zonas de montaña. En la montaña ponferradina, la policía municipal informó ayer de la intervención de auxilio que tuvieron que efectuar en la tarde-noche del domingo para rescatar a medio centenar de vehículos que habían quedado atrapados en la nieve a la altura de la localidad de Bouzas. El concejal de Tráfico de Ponferrada, Aníbal Merayo, hizo un llamamiento «a la prudencia de las personas que deciden disfrutar de una jornada de nieve para que extremen las precauciones y que siempre lleven cadenas».
En Cebrero también se formó un tapón en la salida a Piedrafita, cuando comenzó a nevar por la tarde. Los coches aparcados en los arcenes impidieron pasar a la maquina quitanieves y provocó los primeros accidentes y que algún se produjeran retenciones de hasta tres horas para cubrir un recorrido de apenas diez minutos, según explicó alguno de los conductores bercianos afectados.