Granjeros y piratas toman Coyanza

Impresionante, espectacular, trabajado... son algunos de los calificativos que pudieron oírse ayer cuando al final del desfile mayor del carnaval de Valencia de Don Juan apareció el Barco Pirata. Sus dimensiones hacían que fuera a paso lento para ir sorteando las calles, como si discurriera por alta mar. Hasta el balanceo de las olas imitaba esta reproducción.

Pero no fue el único grupo que optó por disfrazarse de piratas. Hubo varios. Aunque la comitiva gozó de una gran variedad multicolor en la que no faltó una espectacular montaña rusa ni tampoco agricultores, libros, militares, guardias civiles, toreros, pájaros, la familia de los 101 Dálmatas, los ‘clips’ de Playmóbil, vestidos de fantasía al modo del carnaval de Venecia, granjeros, señoritas, y un largo etcétera de personajes más.

El tiempo resultó muy agradable. El desfile salió puntual a las seis de la tarde, como estaba previsto, de las proximidades del Jardín de los Patos. Tras recorrer las principales calles de la localidad, concluyó en la plaza Mayor, donde se sirvieron las típicas orejas y hubo baile. Hacia las ocho se dieron a conocer los ganadores de los premios de cada una de las categorías a concurso a los que el Ayuntamiento ha destinado más de 2.300 euros.

Mañana, martes, tendrá lugar el desfile infantil que saldrá de las antiguas escuelas a las cinco de la tarde.