Gas Natural pretende que la Vasco rebaje un 25% el precio que pagan otras eléctricas

En un momento de asfixia para las empresas mineras, y de dificultad general de los mercados eléctricos, el precio que Gas Natural Fenosa exige para firmar contratos de abastecimiento a la Hullera Vasco Leonesa supone una rebaja del 25% sobre los precios que pagaba el año pasado por el mismo mineral, y de entre un 25 y un 30% sobre las cuantías que las otras compañías eléctricas están pagando en la actualidad por el carbón nacional.

El precio del carbón internacional se encuentra en mínimos históricos, de forma que el mineral que llega al puerto de Gijón y se traslada a la central térmica de La Robla tiene en las últimas semanas un precio que ronda los 60 euros por tonelada. Es el mismo precio que ahora exige Gas Natural a la Hullera Vasco Leonesa para firmar contratos de abastecimiento.

Se trata sin embargo de unas cifras que la compañía minera considera incompatibles con sus niveles mínimos de rentabilidad. De hecho, después de los recortes de los últimos años, el real decreto que fijó en 2014 (como último ejercicio regulado) cantidades y precios a consumir por las térmicas acogidas al mecanismo de garantía de suministros establecía el precio de suministro de cada tonelada de carbón de la Vasco a la térmica de La Robla en 79,72 euros por tonelada.

Un precio que se estableció para la compra el año pasado por parte de Gas Natural de 385.000 toneladas, lo que habría supuesto una facturación para la compañía minera hoy en preconcurso de acreedores unos ingresos de 30,7 millones de euros.

Sin embargo, la compañía eléctrica únicamente consumió en todo 2014 poco más de 25.000 toneladas de carbón de la Vasco. Es decir, una facturación de poco más de dos millones de euros.

Las cifras tienen especial relevancia si se tiene en cuenta que, aunque con un drástico proceso de recorte, los ingresos de la compañía minera no sólo vienen de las propias ventas, sino de las ayudas a la producción que compensan las pérdidas que implica la extracción de carbón nacional. Es decir, que las ayudas que la Vasco debía cobrar el año pasado por el mineral suministrado a Gas Natural se vieron reducidas en la misma medida: percibió (de momento sólo en parte, por impago del Gobierno) un porcentaje mínimo del dinero que se le había asignado en concepto de ayudas.

?La circunstancia resulta especialmente dramática para la comapñía minera si se tiene en cuenta que Gas Natural es, a través del Grupo II de la térmica de La Robla, el cliente principal sobre el que se sustentan las cuentas de la Vasco.

Además, las otras eléctricas que sí siguen comprando carbón a la minera, aunque en cantidades menores (Iberdrola y Endesa), pagan actualmente la tonelada de carbón nacional a entre 80 y 85 euros, según los datos de la compañía.

Arranca la térmica

Mientras se produce esta situación y arranca la negociación de expediente de regulación de empleo que llevará al paro a los 700 trabajadores de la plantilla y de las subcontratas de la extractora, Gas Natural arrancó ayer el Grupo I de la térmica de La Robla, según denunció el comité de empresa. Un grupo que funciona con carbón de importación. Algo que los representantes de los trabajadores consideran «incomprensible», si se tiene en cuenta que, como lamenta la propia eléctrica, tiene acumulado en su parque un stock de carbón autóctono de 580.000 toneladas. Un volumen de mineral que tiene además paralizado desde 2011.

La compañía eléctrica recibió el pasado viernes nuevos suministros de carbón de importación, procedentes del puerto de Gijón.