Agrovet estima que la superficie de cultivo se duplicará en el Órbigo

Laboratorios Agrovet ve en la posible entrada de Hopsteiner en el sector del lúpulo una oportunidad de relanzamiento del cultivo en la provincia. Agrovet, constituido recientemente como primer certificador de lúpulo del país anuncia que mantendrá sus programa de trabajo con cultivadores y cerveceras.

Su director gerente, Pablo Flórez, señaló ayer que la entrada de la compañía «obligará al agricultor a tener que ser más técnico y profesional y esto es muy bueno. Implica un cambio grande y una inversión importante en secaderos nuevos, peladoras y paletizadores», que impulsará un nuevo crecimiento del cultivo en León. Así, considera que la ribera del Órbigo «puede ganar 500 hectáreas con facilidad, porque aún no se ha despoblado, es donde más se trabaja y todavía hay gente que lo ha vivido». Además, el cultivo podría regresar a otras vegas en las que ya se perdió.

Variedades leonesas

En cuanto al papel de Agrovet como centro certificador y en las investigaciones abiertas, Flórez señaló que la situación no cambia los planes. El laboratorio y la SAT Agrupación de Cultivadores de Lúpulo iniciaron un trabajo sobre enfermedades y plantearon a la Junta un proyecto para la obtención de nuevas variedades.

Está previsto que en septiembre se pruebe en invernadero las variedades obtenidas in vitro que «permitirá multiplicar en León variedades sin patente sin necesidad de acudir a otro mercado a adquirirlas», a la vez que se garantiza la pureza de la variedad y la ausencia de agentes víricos. Además, «recuperará las variedades autóctonas de León y, mediante híbridos, obtener mejoras en éstas, sin perder las características propias».

Agrovet ha mantenido contactos con las cerveceras para que éstas lo reconozcan como centro certificador de lúpulo. En este sentido, el centro deberá «adaptarse a una serie de protocolos y normas del sector».