El PP manda en Astorga por primera vez después de 27 años
Arsenio García toma las riendas del Ayuntamiento pidiendo diálogo y reponsabilidad.
Arsenio García tras ser elegido alcalde de La Bañeza
Normalidad. Esta es la palabra que mejor define el trascurso de la investidura del nuevo alcalde del Ayuntamiento de Astorga. Arsenio García se alzó esta mañana con el bastón. La lista que encabezó el pasado 24 de mayo resultó la más votada por los ciudadanos de Astorga, logrado ocho concejales, que aunque no le dieron la mayoría absoluta si una amplía diferencia respecto a los tres grupos de la oposición.
Siguiendo con lo anunciado desde finales del pasado mes, el PAL e IU se abstuvieron, mientras que el PSOE optó por votar a su candidata, Victorina Alonso, que no logró acercarse a los apoyos de Arsenio García, que se ha convertido en el primer alcalde del PP, después de 26 años de gobierno socialista.
El nuevo regidor apeló al consenso, la concordia, el diálogo y la responsabilidad, y anunció que el primer eje de este gobierno debe ser el empleo y la protección social, como máxima prioridad de las políticas municipales. Además, compromete rigor y la estabilidad presupuestaria, transparencia y el apoyo a la promoción y desarrollo de las actividades económicas y sociales que contribuyan a impulsar el sistema productivo y el empleo.
Palazuelo afronta su cuarto mandato en La Bañeza con el compromiso de potenciar el empleo
La Bañeza también ha celebrado esta mañana la sesión de investidura del alcalde, José Miguel Palazuelo, que transcurrió según lo previsto. El socialista revalida el cargo tras lograr una mayoría absoluta en las urnas el pasado 24 de mayo. Un veterano que afronta su cuarto mandato con el compromiso de potenciar el empleo, aplicando bonificaciones a emprendedores y empresas y rebajando la presión fiscal.
El grupo entrante en la corporación Ahora sí se puede La Bañeza, encabezado por Carlos Cadenas, retiró su candidatura y se abstuvo en la votación. Quien la mantuvo fue el popular Pedro Rancho, que logró los apoyos de su grupo pero insuficientes frente a la mayoría de Palazuelo, que volvió a coger el bastón, comprometiendo transparencia y diálogo para los próximos cuatro años.