«Los mineros pagan un tributo vital a la mina, imposible de entender e injusto»

«La minería, desgraciadamente, una vez más está de luto». Así expresó ayer su pésame Fitag UGT en un comunicado en el que traslada a la familia, amigos y allegados de Roberto Calviño, sus «sentidas y profundas condolencias». A través de la nota, el sindicato también desea una pronta recuperación «del otro compañero implicado en el accidente del día de ayer —por el miércoles— en la mina de Cerredo, Javier Lago».

«Los mineros pagan un tributo vital a la misma, que es imposible de entender, injusto, y terrible. Su vida, algo impagable», continúa el sindicato en la nota en la que reconoce que «el trabajo en la mina es duro, peligroso, en muchas ocasiones penoso por la propia singularidad del mismo, y en demasiadas ocasiones, minusvalorado».

Fitag UGT abunda en las circunstancias que rodean el trabajo en la mina y asegura que «en estas condiciones se desarrolla una forma de entender la vida diferente, se convive con el riesgo permanentemente y así, la solidaridad y el compañerismo, son elementos consustanciales al colectivo minero», unos trabajadores que califica de «humildes, pero orgullosos de serlo».

Respecto a las causas del accidente en la mina de Cerredo que ha causado la muerte de Roberto Calviño, trabajador de la empresa Minera Astur-Leonesa, la delegación de Industria del sindicato advierte que estará pendiente del desarrollo de los acontecimientos. «Permaneceremos vigilantes a que la investigación que al respecto debe de abrirse, realice sus tareas con rigor y agilidad. Valoraremos las conclusiones que al respecto se saquen, y actuaremos en consecuencia», concluye la nota de condolencia.