OPOSICIÓN A LAS BALSAS DE CONFEDERACIÓN
Exigen un informe más preciso sobre el impacto de los embalses en el lúpulo
Los cultivadores solicitan a la CHD que la Aemet participe en el nuevo estudio
Los lupuleros de León han solicitado a la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) que se emita «un nuevo informe» sobre el posible impacto de la construcción de los embalses de La Rial y Los Morales en el cultivo del lúpulo, especialmente en las parcelas más cercanas al agua embalsada, y que éste se incorpore al estudio de impacto ambiental del proyecto. Además, solicitan que en el estudio que se encargue participen técnicos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
La solicitud se fundamenta en las «carencias metodológicas y en los datos utilizados» que la Sociedad Agraria de Transformación Lúpulos de León ha detectado en el estudio de impacto ambiental de la regulación lateral del río Órbigo mediante la construcción de las presas citadas. Así, se estima necesario «un nuevo informe más riguroso, que estudie con mayor nivel de detalle y empleando adecuadamente las fuentes disponibles en cuanto a series metereológicas de aplicación al supuesto».
Los cultivadores de las parcelas colindantes a estos pequeños embales, aseguran que el incremento de la humedad «puede favorecer enfermedades en el lúpulo como el oídio, en un sector al que se ha restringido el uso de tratamientos fitosanitarios. Además, en general existen serias dudas sobre la inocuidad de estos proyectos», señaló el asesor legal de la agrupación, Carlos González-Antón.
Los cultivadores estiman que existe una «errónea aplicación del índice Vernet, relativo a la importancia del régimen pluviométrico», de forma que la comparación de los datos de la estaciones meteorológicas que se utilizan para realizar la comparación, las de La Virgen del Camino y Carrizo de La Ribera, dan a entender que en Carrizo el clima «es ‘menos continental’ que el de La Virgen del Camino, cuando es precisamente al revés, tratándose de un argumento que es empleado en diversas citas para justificar la no afección de las presas previstas».
Los lupuleros entienden que la comparación de las estaciones propuestas no sirven para comparar los datos obtenidos por una y otra por situarse la de Carrizo «en el fondo del valle», mientras que la de La Virgen se sitúa «en un altiplano expuesto», de suerte que los índices de humedad «son significativamente distintos ya únicamente por el emplazamiento» de estas. Además, existen «observaciones ciertamente subjetivas», como los días de rocío o escarcha, Que se anotan «de forma manual en cada estación» y que «dependerán en gran medida de la rigurosidad del observador».
Los lupuleros creen que la participación de técnicos de la Aemet en el estudio proporcionará «datos rigurosos» frente a la metodología que ha empleado el estudio de impacto ambiental expuesto al público, «que dista mucho de ser la más adecuada para poder afirmar con rotundidad que no se van a producir daños en los cultivos de lúpulo existentes».