La imaginación se pasa al lado más inocente

a.g. valencia | la bañeza

Don Carnal puede estar tranquilo. Muy tranquilo. En La Bañeza tiene cantera para rato. Así quedó demostrado ayer en el desfile infantil, el que hace protagonistas a los más pequeños de la casa. El Carnaval se ha puesto del lado más inocente y por eso los niños pudieron cambiar los deberes, los libros y las clases por una buena dosis de diversión e imaginación. Los chavales dejaron a un lado las tareas del día a día para salir a desfilar y hacer alarde de ganas. Por eso Don Carnal no tiene de qué preocuparse.

La comitiva infantil, a la que también se sumaron los adultos porque en La Bañeza la fiesta carnavalera no entiende de edad, salió puntual, sin miedo al frío. Antes del arranque las tribus aguardaban con ganas el comienzo. También las flores y los jardineros, Spiderman o unas simpáticas telas de araña con habitantes de muy corta edad. Ya se sabe que el Carnaval se vive desde la cuna. Solo hace falta echar una vistazo para comprobarlo.

No faltaron los clásicos. Heidi, Pedro, el abuelo y hasta Niebla se trasladaron a La Bañeza en una simpática carroza, también una legión de escoceses bailando los últimos temas y una lograda y multitudinaria Patrulla Canina desfiló por las calles de la ciudad. No faltó ni el niño que los capitanea. Mucho confeti y serpentina para esta nueva misión carnavalera.

En todo el recorrido el público animó a los distintos personajes. Les fotografió y les grabó. Auténticas estrellas estos pequeños carnavaleros. Además, el desfile también contó con animadas charangas que durante todo el trayecto, que se prolongó durante más de una hora y media, pusieron los acordes para bailar y hacer aún más animada la tarde. Con su música, los pescadores, Frozen, los indígenas e incluso Trancas y Barrancas, las famosas hormigas televisivas, no pararon un segundo.

Los que tampoco faltaron fueron los carnavaleros por libre. En La Bañeza son parte de la esencia de la mascarada. Ya se sabe. Entre el público ya asomaban muchas cabecitas disfrazadas y junto a ellos los que ya no son tan niños pero que en estas fiestas se lo pasan como si lo fueran. Entre grupo y grupo no era difícil ver a un peculiar ‘pizzero’ ni a un vendedor de ancas de ‘runner’. Por si el gusanillo de la merienda se hacía de rogar también había un ‘simpático’ cortador de jamón y hasta un fotógrafo con una cámara de ‘antigua generación’.

Al finalizar el desfile, que plantó cara al mal tiempo y salió ganando, se celebró una chocolatada, donde los niños volvieron a ser los auténticos protagonistas. La tarde siguió animada con la actuación de la charanga los Artistas del Gremio y por la noche fue la bruja la que reinó en la ciudad en una de las madrugadas más carnavaleras.

Don Carnal ya se siente un bañezano más y, todavía, hoy seguirá haciendo de las suyas. A las 17.30 horas, de la calle Labradores, saldrá el gran desfile de Carnaval. A la cita se esperan unos 70 grupos, 22 charangas, 20 equipos de música y hasta 25 carrozas que llevarán a lo más alto la mascarada bañezana. Además, esta tarde la musa de 2016, Anais Santos, irá encabezando la gran comitiva que se rinde a los pasos de Don Carnal. A la fiesta aún le quedan ganas y los bañezanos prometen exprimirla. Estos días es la localidad de las máscaras, de la alegría. Es el Carnaval hecho ciudad.