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TEMPORAL EN LA PROVINCIA

La nieve obliga a circular con precaución en carreteras de la provincia de León y corta Pajares para camiones

Cadenas para circular por San Isidro, Leitariegos, Tarna, Cerredo, Somiedo y Ventana. Se recomienda precaución para transitar por la AP-66, en Canales-La Magdalena.

Nevada en la zona de Salencias, en la estación de San Isidro

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León

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La nieve caída en las últimas horas en la provincia de León dificulta la circulación por varias carreteras. Los problemas mayores se registran en la N-630, la principal vía alternativa de comunicación a la Autopista del Huerna entre Asturias y León, a la altura de Villamanin de la Tercia, donde entre los kilómetros 105 al 87 está prohibida la circulación de camiones y las cadenas son necesarias en seis altos de la red regional de carreteras. También se recomienda precaución para transitar por la AP-66, en Canales-La Magdalena.

Según informa el Servicio de Emergencias (SEPA), los puertos en los que se requieren cadenas son los de San Isidro, Leitariegos, Tarna, Cerredo, Somiedo y Ventana.

La Agencia Estatal de Meteorología tiene activados hoy la alerta naranja (riesgo importante) por nevadas tanto en la cordillera cantábrica como en Picos de Europa, donde se esperan precipitaciones a una cota de 500 metros que en algunos puntos podrían alcanzar los 30 centímetros.

En Zamora la nieve complica el tráfico en la A-52, entre Padornelo y Hedradas, mientras que en Segovia está cortada para camiones la CL-601 a la altura de La Granja. Los mayores problemas se registran en Salamanca, en La Hoya, donde el tráfico en la CP-004 está prohibido para camiones y es obligatorio el uso de cadenas para turismo.

Las intensas precipitaciones que siguen afectando a buena parte de la Comunidad han obligado la Confederación Hidrográfica del Duero a elevar la alerta a 13 ríos, si bien los niveles en las cabeceras van disminuyendo y las ondas de las avenidas se van trasladando a los tramos medios y bajos de los ríos más importantes. La crecida del río Arlanza se traslada a su cuenca baja y al Pisuerga, mientras que la del Duero, que se mantiene en niveles altos en el tramo situado aguas abajo del embalse de la Cuerda del Pozo, se va trasladando paulatinamente a su tramo medio y bajo de las provincias de Soria, Burgos y Valladolid. La misma situación se registra en el río Órbigo, cuyo caudal supera los niveles de alarma en las localidades zamoranas de Manganeses y Santa Cristina de la Polvorosa.

Los ríos más afectados actualmente por las crecidas son el Luna-Orbigo y sus afluentes Omañas y Tuerto en la provincia de León,  Arlanza y sus afluentes Arlanzón y Pedroso en las provincias de Burgos y Palencia, el Duero y sus afluentes Revinuesa y Ucero, en las provincias de Soria, Burgos y Valladolid, el Eresma y Riaza en Segovia, el Esgueva en Valladolid. Durante la pasada noche también superaron los niveles de alerta los ríos Cega, en Pajares de Pedraza (Segovia); Tera, en Puebla de Sanabria y Camarzana de Tera (Zampora) y Vena en Burgos.

Aunque durante el día de hoy se prevé continúen las precipitaciones, teniendo en cuenta que la cota de nieve bajará a cotas medias o bajas, se espera que se disminuyan notablemente las escorrentías en los tramos altos de los ríos, por lo que la CHD prevé que la situación se tienda a normalizar en estas zonas. No obstante, las crecidas se comenzarán a notar en los casos de los ríos Pisuerga y Duero en sus tramos medios y bajos a partir del día de hoy y hasta los próximos cuatro días. En el Pisuerga se pueden alcanzar los niveles de alerta en Valladolid dentro de dos días; mientras que en el Duero, se estima que la punta de la crecida de este río por la provincia de Zamora, se produzca en 3 a 4 días, con caudales que también pueden alcanzar los niveles de alerta.

La CHD se informa que el embalse de la Cuerda del Pozo en Duero (Soria) continuará realizando un desembalse preventivo en torno a los 100 metros cúbicos por segundo, con el fin de recuperar el volumen de resguardo que se había absorbido en estos últimos días.

Además, las inundaciones que se vienen registrando en las riberas del Arlanza y del Duero y en varios ríos leoneses, han provocado el cierre de una decena de carreteras secundarias. En Burgos están cortada la BU-1941, en Royuela del Río Franco, la BU-9021, en Quintanilla del Agua, y la BU-8205, en Contreras, y también que circular por precaución por la N-234, en Salas de los Infantes y por la BU-8205, en Vizcaínos. En Soria esta cortada la SO-6130 en Vilvestre de los Nabos; la SO-4009, en Langa de Duero; la SO-6007, en Garray, y la SO-5117, en Valdelinares, mientras que León no se puede circular por la CL-631 en Corbón del Sil; por la LE-460, en Torre del Bierzo y por la LE-6421, en Nistal.