El mundo rural se queda sin otro tren en las Cortes
El PP rechaza las enmiendas del PSOE para recuperar el servicio.
a.g.v. | astorga
El tren parece que volvió a pasar de largo. El grupo popular rechazó ayer en el pleno de las Cortes la posibilidad de poder votar dos enmiendas, presentadas por el PSOE de León, encaminadas a recuperar y mantener el transporte ferroviario en los pueblos de la provincia, según explicó el procurador leonés y portavoz socialista en la Comisión de Fomento, Tino Rodríguez, quien avanzó que las propuestas del PSOE iban encaminadas a exigir al Ministerio de Fomento el urgente desarrollo de una adecuada reestructuración ferroviaria que garantice un apropiado acoplamiento de servicios y frecuencias para evitar el aislamiento de municipios y comarcas con conexión ferroviaria.
Por otro lado, la segunda de las enmiendas, que no fue admitida, pedía a la Junta la elaboración de un Plan de Servicios Ferroviarios de Interés para Castilla y León, consensuado con agentes sociales y administraciones locales, que garantice un servicio de trenes adecuado y suficiente.
En esta línea, el portavoz socialista criticó que los discursos de la Junta reflejan «mucha cifra pero pocos rostros, piensan mucho en la rentabilidad económica y muy poco en la rentabilidad social de los vecinos del medio rural de León», enfatizando que desde diciembre de 2012 los pueblos sufren la «saña» de los recortes que «causó el plan de racionalización de los servicios de transporte ferroviario impulsado por el Gobierno de Rajoy».
Rodríguez destacó, además, que la llegada de la Alta Velocidad a León «ha perdido su esencia de acercar personas, alejando y aislando a los hombres y mujeres que viven en el medio rural». Una realidad que ejemplificó con municipios como el de Brañuelas, donde «ven pasar de largo ocho de los doce trenes que cada día pasan por su municipio» o como el caso de la Granja de San Vicente donde sólo para un tren al día. Para el socialista este panorama es «alarmante», recordando que también se extiende a otras comarcas como Sahagún o la línea de Feve, en la montaña.
Rodríguez apuntó que los recortes en los servicios ferroviarios supone el gasto de la mitad de la pensión para muchas de las personas mayores que se ven obligados a pagar un transporte privado para desplazarse al médico todas las semanas «o la decisión de muchos jóvenes de no emprender un negocio en su pueblo ante el aislamiento al que se ven abocados», afirmó.
El procurador leonés del PP y alcalde de León, Antonio Silván, fue quien defendió la proposición no de ley de su grupo, rechazando las enmiendas socialistas en la tribuna de las Cortes Autonómicas, alegando que sus propuestas se ciñen exclusivamente a la Alta Velocidad, a lo que Tino Rodríguez le replicó que «de poco vale abrir líneas de AVE si en consecuencia se cierran los pueblos».