NUEVO TEMPORAL DE FRÍO
La cota de nieve se desploma y complica el tráfico en León
Las placas de hielo y la ventisca obligan a cortar tres carreteras y a exigir cadenas en otras siete. 670 alumnos no pudieron ir a clase.
Pajares cerró ayer el tráfico a camiones y obligó a poner cadenas al resto de conductores. RAMIRO
m. carnero | león
El nuevo temporal que atraviesa la provincia dejó ayer importantes nevadas en cotas muy bajas. Tanto es así que la capital leonesa amaneció con una importante nevada que cesó a media mañana y que no causó a penas complicaciones. En el resto de la provincia la situación fue diferente. Los mayores problemas se produjeron en las zonas de la montaña central y oriental, fundamentalmente, donde la intensidad de la nieve y la fuerte ventisca complicaron el tráfico en muchas carreteras, tres de las cuales estaban cerradas al tráfico. Es el caso de la de Cofiñal (LE-333), Redipuertas (LE-321) y Besande (LE-233). Otras siete, ubicadas en Burón, Toreno, Torrebarrio, Caboalles de Abajo, Meroy, Vega de los Viejos y La Baña, requerían el uso de cadenas para su circulación, al igual que el puerto de Pajares, en la N-630, que restringió el paso de camiones a primeras horas del día.
Estas complicaciones en las carreteras impidieron además que un total de 670 alumnos de las zonas rurales de la provincia, pertenecientes a 22 colegios, no pudieran acudir a sus centros. El mayor susto se lo llevaron los alumnos de la zona de Maragatería cuando el autobús escolar que los trasladaba al IES de Astorga derrapó a primera hora de la mañana y a punto estuvo de salirse de la calzada entre Luyego y Lagunas de Somoza. La causa de este incidente pudo ser una de las muchas placas de hielo que ayer complicaron la circulación en gran parte de las carreteras de la provincia. La pericia del conductor, que logró que finalmente el autobús quedara varado en la cuneta, logró que ningún alumno resultase herido.
La Agencia Estatal de Meteorología espera para hoy que continúen las nevadas en torno a los 700 y los 1.000 metros en la zona Cantábrica. En el extremo norte de la provincia, los cielos estarán nubosos o cubiertos con precipitaciones débiles. En el resto, no se descartan precipitaciones débiles dispersas, tendiendo a abrir claros por el sur. Las temperaturas nocturnas experimentarán un ligero descenso, con mínimas entre -5 y 2 grados, y diurnas en ascenso ligero, con máximas entre -1 y 10, lo que provocará heladas a primeras horas de la mañana.
