Azucarera apela a los márgenes de la remolacha para fomentar la siembra
La fábrica estará abierta todo el mes de marzo para garantizar «rendimientos razonables».
Aspecto que presentaba hace una semana una finca de Zotes del Páramo. MEDINA
A. Domingo | Redacción
A mal tiempo, buena cara. Es la política de Azucarera Iberia ante el retraso de las siembras en la Zona Norte y, de manera especial, en León. Ayer se reunió la Mesa de Fábrica de La Bañeza, encuentro en el que la industria animó a las organizaciones agrarias a que inviten a los agricultores a sembrar. Ante las dificultades objetivas que presenta la última campaña sin cuotas, Azucarera comparó ayer los rendimientos de la remolacha a los del maíz y el girasol y se comprometió a mantener la fábrica leonesa abierta todo el mes de marzo, con el fin de «permitir a los agricultores que siembran tarde alcanzar rendimientos razonables».
También facilitó recomendaciones agronómicas, que compensen las siembras en mayo y junio y anunció que ajustará la apertura de la fábrica en función del desarrollo del cultivo, mientras, a la vez que estudia las opciones para satisfacer también a los agricultores que pudieron realizar sus siembras a tiempo, bien abriendo la fábrica para recoger sus producciones o desviándola a otras factorías.
Si bien el retraso reduce sensiblemente, según los datos que maneja la Asociación de Investigación para la Mejora del Cultivo de la Remolacha Azucarera (Aimcra), Azucarera subrayaba ayer que la mayor luminosidad de estos días del año permite «que la tierra se oree y que la velocidad de crecimiento de las plantas sea mayor».
1.250 € POR HECTÁREA
«La estimación de los beneficios para la remolacha sembrada en estas fechas se sitúa en 1.250 euros por hectárea. Para rendimientos de 100 toneladas por hectárea, inferiores a los de la campaña pasada, a un precio medio de 32 euros por tonelada, el margen se sitúa en 400 euros por hectárea», a los que se suman otros 870 euros por la misma superficie «en concepto de ayudas», aseguraba ayer un comunicado de la empresa.
La industria apuntó que el maíz deja al campesino 480 euros por hectárea con un rendimiento de 13.000 kilos —muy bueno— y un precio alrededor de 150 euros por tonelada —bastante bajo, similar al que se ha pagado en el último año— Por su parte, el margen para el girasol se sitúa en 150 euros, a un precio de 350 euros por tonelada y un rendimiento de tres por hectárea.
La industria también comunicó que el día 9 efectuó el último pago de la campaña 2015/2016, en la que los agricultores han percibido una media de 32,7 euros por tonelada y 871 euros por hectárea por ayudas.