Los autónomos de Embutidos Rodríguez al menos cobrarán el salario mínimo

a.g. valencia | astorga

Dos meses después del incendio que calcinó el núcleo de producción de Embutidos Rodríguez, ayer, en el transcurso de la reunión de la Fundación Anclaje, se pusieron sobre la mesa los paquetes de medidas, supeditados al empleo, y que van encaminados a la reconstrucción de la planta y a las ayudas a los trabajadores, tanto por cuenta ajena, como autónomos.

En un receso del encuentro, que, puntualmente, presidió la consejera de Agricultura, Milagros Marcos, la titular del área avanzó las propuestas planteadas. En este sentido, anunció dos paquetes diferentes, en función de la situación de los empleados. Para los autónomos cooperativistas Marcos recordó que «no hay ninguna solución arbitrada», aunque planteó las medidas que «de forma excepcional se tomarán para este caso». La consejera avanzó, al respecto, que hay un compromiso a tres partes —Junta, Embutidos Rodríguez y la cooperativa Servicarne— para que los autónomos afectados cobren el salario mínimo interprofesional, de 655 euros cada mes hasta que se reconstruya la planta. Además, se fija un complemento del 10% por hijo al cargo, hasta el tercero. No obstante, y a falta aún de un mapa social, habrá que analizar cada caso, comprobar que no se está trabajando en ningún otro lugar o que no se cobran prestaciones que superen este salario mínimo.

Para solicitar las ayudas habrá un plazo de adhesión, donde se fijarán los requisitos. Asimismo, desde los sindicatos se recordó que los autónomos que se hayan dado de baja en la cooperativa también podrán pedir las ayudas, siempre que quede demostrado que en el momento del incendio trabajaban para Servicarne en las instalaciones de Soto de la Vega.

Por otro lado, y según lo planteado en la Fundación Anclaje, Marcos adelantó una segunda línea para los trabajadores por cuenta ajena. En este caso, los afectados recibirán un complemento al subsidio por desempleo para acercarse los máximo posible al salario que tenían antes del siniestro. Este paquete también se mantendrá hasta que la fábrica vuelva a levantarse, lo que se prevé a lo largo de 2017.

Al hilo, la consejera puso sobre la mesa que los complementos variarán, aunque la media será de 250 euros al mes, «igual que se ha hecho con los trabajadores de otras fábricas que han pasado por situaciones similares». En este sentido, las ayudas contemplan 20 días al mes y se fijan en 10 euros al día para aquellos cuya base de cotización es inferior a 1.900 euros y de siete euros para quienes exceden este baremo.

Con todo este conjunto sobre la mesa, la consejera recordó que «el objetivo es dar cobertura y respaldar a todos los trabajadores». Si bien el compromiso de las ayudas pasa por un acuerdo a tres bandas, entre la administración, la empresa y la cooperativa, y prevé, según subrayó Marcos, una previsión inicial de un millón de euros. La consejera también manifestó que la planta cuenta con 104 trabajadores por cuenta ajena y 250 autónomos cooperativistas.

Por último, el tercer punto planteado pasa por las ayudas a la reconstrucción de la fábrica. Para ello, la empresa se ha comprometido a contar cuanto antes con un proyecto y la Junta— además de un montante económico que dependerá de la cuantía final, aún por determinar— a dar «carácter de urgencia» a todos los trámites, de modo que no podrán exceder los tres meses, desde su presentación, para «tratar de dar agilidad a la situación, mantener la actividad y regenerar la fábrica».