CAMPO
Sada cumplirá los contratos en León, pero reducirá las aves por crianza
Los productores ganan tiempo para conseguir una nueva industria con la que integrarse.
A. Domingo | Redacción
El Grupo Sada, líder nacional en la producción avícola integrada, cumplirá los contratos con las 23 granjas leonesas afectadas por la decisión de cierre el matadero de Valladolid, al que los avicultores leoneses entregaban los pollos cebados. La empresa adquirió este compromiso en una reunión con representantes de la Consejería de Agricultura y Ganadería celebrada la semana pasada. La decisión alivia la situación de los granjeros, que, sin embargo, advierten que el número de aves que entregarán a Sada para el sacrificio en el tiempo que les resta de contrato no será el mismo que en crías anteriores, aseguraron los afectados consultados.
La situación mejora para los productores, en cuanto que disponen de más tiempo —entre dos y ocho meses, según la fecha en la que concluye el acuerdo— para buscar un matadero con el que seguir produciendo, pero no están conformes con la decisión de retirar sólo los pollos de la planta baja —las granjas afectadas, generalmente las más antiguas, disponen de una planta baja y primer piso para la cría—, lo que merma el número de broilers (pollos cebados para carne) entre el 30% y el 50% según los casos.
Si bien la Junta de Castilla y León ha manifestado su compromiso de recabar datos sobre la situación de las granjas a fin de ayudarles a encontrar una salida, los productores dan por hecho que habrá granjas que cerrarán, habida cuenta la necesidad de adecuar las instalaciones a las exigencias de las industrias cárnicas —lo que puede suponer inversiones de no menos de 6.000 euros—, así como por la saturación del mercado.
Proceso de selección
«La industria busca las granjas más modernas y elimina las antiguas», señalaron los avicultores, que prefirieron mantenerse en el anonimato. «Cada vez piden menos concentración de pollos por metro cuadrado, la granja debe estar climatizada y, además, presurizada», añadieron. A todo esto se une que la industria «ha abierto sus propias granjas», lo que reduce las posibilidades de encontrar empresa integradora para los avicultores a medida que vayan cumpliendo sus contratos con Sada.
Las granjas afectadas por la situación de Sada producían alrededor de cinco millones de broilers en cinco crianzas anuales, lo que en total representa, aproximadamente, la cuarta parte de los pollos que se ceban en la provincia leonesa. León es la primera provincia de la Comunidad autónoma en cuanto a cría de pollos, con un total de 101 avicultores en régimen de integración con la industria.