AYUDA SOCIAL ■ LA LABOR DEL AYUNTAMIENTO
El servicio de comida a domicilio de Santas Martas llega ya a 16 vecinos
Los menús, supervisados por el médico, son llevados por Afadeva
maría carnero | león
El Ayuntamiento de Santas Martas se ha sumado a otros municipios de la provincia que prestan un servicio diario de comida a domicilio para sus vecinos más dependientes.
Desde hace unos meses, y gracias a un convenio de colaboración con Afadeva, Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer de Valdepolo, ubicada en la Aldea del Puente, un total de 16 vecinos de las localidades de Valdearcos, Reliegos, Villamarco y Santas Martas, reciben en sus domicilios de lunes a viernes un completo almuerzo adecuado a su edad y estado de salud.
Todo surgió el pasado otoño, cuando en el Ayuntamiento, que gobierna la alcaldesa popular María Aranzazú Lozano, recibió un par de peticiones de vecinos que solicitaban este tipo de ayuda. Fue entonces cuando se pusieron en contacto con Afadeva, asociación con la que ya colabora el Ayuntamiento desde hace años, para estudiar la posibilidad de prestar un servicio de ayuda a domicilio similar al prestado ya en Valdepolo.
Después se mantuvo una reunión a la que se convocó a todos los vecinos del pueblo para informar de los detalles de este servicio, por el cual los usuarios pagan cinco euros por día y menú y cuyo gasto de transporte corre a cargo del Ayuntamiento. «Nuestra sorpresa fue que aunque las peticiones en principio fueron muy pocas, la gente se fue animando al ver las ventajas de este servicio», explicó la alcaldesa.
Bajo control médico
Después se mantuvo una reunión con el médico del centro de salud y con el trabajador social, dos de las personas que mejor conocen a la población del municipio, para personalizar los menús de los vecinos que solicitaron el servicio, en función de su edad y de su estado de salud.
Los vecinos reciben en menú a su casa a partir de las 13.30 horas de lunes a viernes, perfectamente envasado en recipientes herméticos, de manos de Ángel, un trabajador de la asociación, que entra en las casas y prácticamente les sirve la comida en la mesa. «Este servicio nos da mucha tranquilidad, a nosotros como Ayuntamiento, y a las familias de los vecinos que lo solicitan, ya que saben que comen todos los días una alimentación personalizada, variada, y que encima un trabajador les visita cada día y se preocupa por su estado», afirma la alcaldesa que asegura que todos los usurarios están «plenamente satisfechos». Además, las familias están tranquilas ya que «saben que sus mayores no tienen que cocinar, ni manejar fuegos ni utensilios que puedan llegar a ser peligrosos».
María Aranzazó Lozano considera que «los ayuntamientos debemos prestar estos servicios y preocuparnos por el bienestar de nuestros mayores, ya que es una forma de conseguir que no abandonen sus casas, y de frenar esta despoblación que tanto está afectando al medio rural», explica la regidora.
La alcaldesa con Vitorina, una de las vecinas que recibe este servicio. SECUNDINO PÉREZ
Una vecina de Santas Martas con su menú en la cocina de su casa. SECUNDINO PÉREZ
Entrega de la comida en uno de los domicilios de Santas Martas. SECUNDINO PÉREZ