La Cueta dice «no» al único centro de esquí de fondo de toda la cordillera

maría carnero | león

La noticia ha caído como un jarro de agua fría en la comarca de Babia, donde hace un mes se celebraba un multitudinario acto para dar a conocer a los vecinos el proyecto para instalar un centro de esquí de fondo en La Cueta, el único de estas características de toda la Cordillera Cantábrica. A pesar del apoyo tanto de los Ayuntamientos de Cabrillanes como del San Emiliano, así como de la mismísima Diputación de León y de la dirección del Parque Natural de Babia, la Junta Vecinal de La Cueta, propietaria de los terrenos donde se ubicaría la instalación, votó en la tarde del domingo su rotundo rechazo al proyecto. Su presidente, Rufino Blanco, ya anunció durante la presentación del proyecto en Huergas de Babia que la última palabra la tendrían los vecinos a los que se les consultaría a través de una reunión que finalmente se celebró este fin de semana. De los 32 asistentes con derecho a voto que asistieron a la reunión, 19 dijeron que no al proyecto, por lo que quedó finalmente rechazado.

«Estoy profundamente disgustada», declaró ayer Lina Freire, alcaldesa de Cabrillanes, municipio al que pertenece La Cueta.

«Es una oportunidad que no deberíamos perder, ya que no vamos a tener muchas», lamentó la alcaldesa. Freire considera que es un «dislate total» dejar escapar este proyecto privado, que suponía una inversión de 200.000 euros para acondicionar 30 kilómetros de pistas para el esquí de fondo. «Toda la comarca estaba ilusionada con el proyecto, que además es impecable, ya que es sostenible y perfectamente compatible con el parque natural», asegura la regidora que recuerda además el apoyo que recibió el proyecto por parte de la Diputación de León, que envió a la presentación en Huergas a tres diputados.

«Los pueblos se mueren por falta de gente», lamenta Friere que recuerda que «esta historia se repite en La Cueta, donde la Junta invirtió hace años más de un millón de euros para hacer una aldea turística y organizar actividades como la escalada que la Junta Vecinal se encargó de tumbar».

Muy rotundo ha sido también el presidente de la Asociación Estas en Babia, Gerardo Manuel Ardura, que engloba a empresarios de la comarca, y que desde el primer momento ha abanderado el proyecto como una manera de revitalizar el turismo y la economía de la zona. «Es lamentable que estos 19 votos trunquen las ilusiones de toda una comarca», manifiesta el presidente de la asociación. Ardura denuncia que «varias personas de más de 90 años, alguna después de muchos años sin ir el pueblo, vinieron a depositar su voto para decidir un asunto que no llegaban a comprender y que a muchos de los allí presentes nos pareció un gesto de poca humanidad».

Además comenta que «un ganadero manifestó expresamente que no había leído el proyecto y otro que como no le beneficiaba directamente, votaba no». Otras personas que viven en Asturias todo el año aseguraron negarse al proyecto alegando que quieren «tranquilidad» cuando se desplacen al pueblo.

De todas formas, tanto desde la asociación como desde el Ayuntamiento de Cabrillanes manifestaron su intención de seguir peleando por el proyecto y acudir a todas las instancias que sean necesarias.