EL ESCÁNDALO DE LA PEDOFILIA EN LA IGLESIA
Veinte exseminaristas se ofrecen para esclarecer los abusos sexuales en el seminario de La Bañeza
Los afectados remiten una carta al obispo y agradecen que quiera que «todo salga a la luz»
a.g. valencia | astorga
Los casos de abusos sexuales registrados en el curso 88/89 en el Seminario Menor de La Bañeza, que el pasado mes de enero destapó una de las víctimas al denunciar públicamente lo ocurrido, suscitó una oleada de reacciones y una suma de apoyos para que la totalidad de los hechos salieran a la luz. La denuncia contra el sacerdote José Manuel Ramos Gordón — que a raíz de que se conociera lo sucedido fue apartado de todos sus cargos— ha descubierto el primer caso de pederastia reconocido por la Iglesia en Castilla y León y aunque ante la justicia civil ha prescrito por el tiempo pasado, el obispo de Astorga, Juan Antonio Menéndez, se comprometió a llegar al fondo de los hechos para que «todas las personas, sacerdotes y encubridores que hayan participado en abusos a menores salgan a la luz y sean justamente castigados». Así se lo recuerdan los exalumnos en una nueva carta, que ayer llegó al Obispado de Astorga, donde un grupo de víctimas ha cogido el guante lanzado por el prelado en una reunión celebrada a finales de febrero.
De este modo, una veintena de exseminaristas se ofrecen — tal y como se recoge en la misiva—a «colaborar en la investigación con los testimonios de lo que pudiéramos observar y vivir en el Seminario Menor de La Bañeza y nos ponemos a su disposición para contestar a las preguntas que, relacionadas con este tema, quieran hacernos».
Igualmente en la carta, los exseminaristas muestran «nuestra grata» sorpresa al escucharle decir que «ha ordenado una exhaustiva investigación para esclarecer los hechos que, relacionados con este tema, sucedieron en el Seminario de La Bañeza y en el colegio Juan XXIII de Puebla de Sanabria».
Como se recordará las víctimas organizaron en febrero una manifestación por las calles de Astorga para clamar justicia. También el prelado ofreció una rueda de prensa para mostrar su rechazo a los abusos y poner sobre la mesa la intención de implementar un protocolo para acabar con esta lacra, así como el compromiso de investigar todo lo ocurrido en los centros.