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LA PARTE DEL INSTITUTO BÍBLICO DE SABERO

El viejo hospital Izaguirre será centro de escultura

La reconversión de la instalación sanitaria, con una inversión de 532.000 €, permitirá acoger obras del artista canario Ángel Peres, que también impartirá cursos en la escuela-taller de escultura.

Aspecto que presenta en la actualidad el hospital minero, cuya cubierta se arregló en 2011. CASTRO

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León

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J.M. Castro | Sabero

El edificio del que fuera hospital minero de la empresa Hulleras de Sabero, que durante décadas presto servicios médicos a los accidentados de la minería, es el lugar elegido para albergar este nuevo centro de cultura.

El Hospital Izaguirre cerró sus puertas poco antes de que lo hiciera en el año 1991 la empresa minera que lo sustentaba. En estos años la principal preocupación de la zona era la búsqueda de nuevos empleos para los más de quinientos mineros que se habían quedado sin trabajo. El poco interés en España por el patrimonio industrial hizo que no se contemplara la posibilidad de mantener aquella instalación como lugar para visitar, enfocada al turismo por aquella época inexistente en la zona. Por ello, sus enseres fueron retirados para evitar su expolio, y el edificio fue desmantelado en gran parte por acciones vandálicas.

En el año 2011, con una ayuda recibida del Ministerio de Fomento, el ayuntamiento acometió unas obras de urgencia para evitar el derrumbe de la estructura, con una inversión de 133.5404 euros

Ahora se pretende acabar su reforma, con un presupuesto de 532.128,84 euros adecuando el interior para el nuevo uso previsto, que permitirá salvar este elemento del patrimonio industrial tan apreciado en todo el valle.

Una de las principales preocupaciones del Ayuntamiento ha sido la de generar actividad económica que permita la creación de puestos de trabajo.

Para su alcalde durante más de dos décadas, Francisco García, «el proyecto cultural que estamos impulsando en colaboración con el IBO es un complemento perfecto al resto de iniciativas culturales y turísticas». El municipio cuenta con el Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León, un museo autonómico referente por la calidad de sus exposiciones y la intensa actividad cultural que realiza; la Cueva de Valdelajo, adaptada para visitas turísticas, todo un lujo geológico; el Canal de Aguas Bravas, que acoge competiciones nacionales e internacionales de piragüismo y cuenta con empresas que realizan trayectos turísticos y deportivos por el río Esla; el alto de La Camperona, que cada dos años acoge una etapa de la Vuelta Ciclista a España y otras muchas citas ciclistas durante el año; las rutas de senderismo, entre las que destacan La Ruta de las Minas y La Ruta de los Miradores, etc. Todo esto ha permitido que el municipio cuente con varios restaurantes, un albergue, casas rurales y próximamente un hotel.

Este proyecto ha logrado unir a los tres ayuntamientos, Sabero, Cistierna y La Ercina, beneficiarios de los fondos mineros procedentes del cierre de Hulleras de Sabero.

La idea de un proyecto conjunto, comarcal, que vertebre cultural y turísticamente un territorio que ha estado por encima de discusiones locales o intereses particulares, lo que abre un camino muy interesante a seguir en otros proyectos.

Ángel Peres fue rescatado del olvido español hace unos años por el Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León. Este escultor canario emigró muy joven a París, donde frecuentó los círculos artísticos de la capital francesa en compañía de alguno de los grandes nombres de la pintura y la escultura del siglo XX. Durante años obtuvo el reconocimiento del público y la crítica del país vecino, ganando importantes premios, como la Medalla de Oro de la Villa, y teniendo numerosa obra en museos en Francia, Marruecos, Canada y otros países.

Entre Peres y las montañas surgió una relación especial, que además acogieron sus obras, y desde entonces sus visitas a la comarca han sido numerosas, impartiendo charlas y talleres y fraguando un proyecto que busca un lugar donde toda su obra repose y pueda ser admirada.

Instituto Bíblico y Oriental

Jesús García Recio, el director del Instituto Bíblico y Oriental de León, es una de las pocas personas en el mundo que conoce lenguas como el sumerio o el acadio, que hace miles de años que dejaron de utilizarse en el medio oriente. Para su dominio además de una predisposición natural que pocos poseen, la herramienta fundamental es el estudio y sobretodo la paciencia.

Y es seguramente esta paciencia, al modo oriental, que tantas veces desespera a los occidentales, la que ha hecho posible que el Instituto Bíblico y Oriental de León sea una realidad en la provincia leonesa.

Sin embargo, Recio no ha visto mermada su ilusión, que acompañada por el impulso de los alcaldes de la comarca, empuja fuerte en lo que parece la recta final del proyecto denominado Obra Cultural y Empresarial de la Montaña.

Un proyecto que cambia el rumbo del instituto, asentándolo definitivamente en la montaña oriental, donde según palabras de Recio «es donde más falta hace y donde más va a brillar», con la creación de una red de museos y centros culturales y de estudio sin igual en nuestro país.