EL FUTURO DE LA MINERÍA ■ EL CARBÓN EN EL PUNTO DE MIRA
HBG despedirá a todos los mineros que no se acojan a las bajas incentivadas
De los veinte trabajadores de la minera, siete no se verán afectados por esta decisión
Una fotografía reciente de las instalaciones de HBG, última mina de interior leonesa en cerrar. ARAUJO
v. araujo | caboalles de arriba
La empresa minera Hijos de Baldomero García (HBG) con una explotación de interior en la pedanía lacianiega de Caboalles de Arriba, La Escondida, ha planteado a sus trabajadores acogerse a la baja incentivada, según afirmaron fuentes sindicales de UGT.
Hace unos días, la única explotación minera de interior de la provincia y de la Comunidad autónoma cerraba por no llegar a un acuerdo con la central térmica por la compra de carbón. Esta medida repercutía a un total de unos 70 trabajadores, de los cuales 50 mineros son eventuales —tenían un contrato hasta fin de obra— y se les presentará la liquidación correspondiente. Al resto, alrededor de una veintena, con contrato fijo, se les había presentado un expediente de regulación de empleo (ERE) o disfrutar de sus vacaciones antes de acogerse al mismo. Pues bien, a estos veinte mineros ahora la empresa les ha comunicado que deberán acogerse a una baja incentivada o se les presentará el despido «de forma inminente», según señalaron desde UGT. En este sentido, la empresa comunicó que esta decisión venía derivada por la falta de actividad y que no se prevé poder iniciar la producción a corto plazo.
Según las fuentes sindicales, señalaron que de los 20 trabajadores afectados por esta medida, siete serán excluidos, ya que tres se harán cargo de los servicios mínimos de la explotación minera, otros tres se prejubilarán en el año 2018 y no les afecta y otro trabajador ya está esperando por la aprobación de la baja incentivada, que ya la había solicitado antes de anunciar la medida la empresa.
Según UGT, la compañía minera ha tomado una «medida drástica, y debería esperar un poco más antes de llevar a cabo esta decisión». En este sentido, desde esta agrupación mantienen que la compañía «ha querido salvar la empresa a costa de los trabajadores», considerando que la empresa ha querido reducir las cargas económicas de la parte social, pues «cree que no venderá carbón ni en lo que queda de año ni en el próximo».
Una de las decisiones que la empresa mantiene con respecto al anterior encuentro es la intención de continuar con la actividad en cuanto se lleguen a algún tipo de acuerdo con las térmicas respecto al precio del carbón. Endesa ofrecía 55 euros por tonelada, «inasumibles para una mina de interior y muy por debajo del precio del mineral de importación puesto en la central», destacaban desde UGT.
De momento, los trabajadores ya tienen intención de comenzar a elaborar un calendario de movilizaciones a partir de la semana que viene y, de este modo, dar a conocer que no están conformes con la situación.