LOS EFECTOS DEL INCENDIO
Las riadas de ceniza y lodo podrían llegar a 18 pueblos de León y Zamora
El satélite muestra que el área quemada en La Cabrera afecta a 10.022 hectáreas
maría carnero | león
A falta del balance oficial de la Junta de Castilla y León del área afectada por el incendio originado en Encinedo el pasado lunes 21, las primeras imágenes vía satélite, tomadas por Deimos, de la zona muestran una superficie quemada de 10.022 hectáreas, según recoge un informe de @eforestal.
El municipio más afectado por el que ya se considera como el incendio forestal más grave del año en España, es Encinedo, que ha perdido 6.731 hectáreas, el 34,47% de su superficie. Le sigue Truchas con 3.045 hectáreas afectadas, el 10,09% del total, y Castrillo de Cabrera, con 245 hectáreas, un 2,11% de su territorio.
El incendio quedó extinguido el pasado domingo, después de las lluvias torrenciales caídas en la zona, lo que ha propiciado auténticas riadas de ceniza y lodo que han desembocado en los ríos Cabrera, en la cuenca del Duero, y Éria, en el Miño-Sil. Según el informe de @eforestal, son 18 los municipios que se pueden ver afectados por la escorrentía de sólidos debido al incendio, diez en la provincia de León y otros ocho en Zamora. Los de León son Alija del Infantado, Benuza, Castrillo de Cabrera, Castrocalbón, Castrocontrigo, Encinedo, Puente de Domingo Flórez, Quintana y Congosto, San Esteban de Nogales y Truchas. En Zamora, los municipios afectados serían Alcubilla de Nogales, Arrabalde, Coomonte, Manganeses de la Polvorosa, Morales de Rey, Muelas de los Caballeros, Santa María de la Vega y Villaferrueña.
Según CHD, desde la comisaría de Aguas, y tras haber inspeccionado la zona, «no se aprecia de momento mortandad significativa de peces» y explican que «las cenizas, al carecer de materia orgánica, no consumen el oxígeno del agua, de manera que no son un elemento especialmente nocivo para los peces.
Fuentes de CHD asegura que la virulencia de las tormentas del domingo y del lunes, tras el incendio, han provocado el arrastre de la ceniza por la escorrentía hacía ríos y arroyos, y ahora se seguirán evaluando los efectos» y admite que «el mayor problema está en que ese agua tan turbia y con impurezas no permite ser tratada para hacerse potable».
Desde el martes, los municipios de Encinedo y Truchas han cortado el suministro de agua potable y es la Diputación de León la que está llevando cinco mil litros de agua embotellada a los habitantes para su consumo humano.