La Guardia Civil sigue el rastro de un coche visto en el lugar del incendio con siete focos

maría carnero | león

Hasta siete focos distintos, todos ellos alineados en la margen derecha de la carretera que une Santa María de Ordás a Valdesamario. Nadie en esta localidad se explica quien ha podido estar detrás de este «delito ambiental» que en la noche del martes al miércoles ha calcinado más de 30 hectáreas de arbolado y que llegó a activar el nivel 1 de peligrosidad por su cercanía con los pueblos de Irian y Carrizal. El alcalde de Santa María de Ordás, el socialista José Luis García, destacó que la rápida intervención de los servicios contra el fuego, y la favorable dirección del viento, que impidió que las llamas avanzaran hacia los pueblos, evitó que el incendio, que por la noche ya quedó sofocado, fuera a más. «Nunca pensé que la gente pudiera dedicarse a hacer esto, no lo entiendo», confesó el alcalde.

Por su parte, la Guardia Civil se encuentra desde ayer investigando la zona del incendio, hablando con los vecinos y recabando pruebas para localizar al autor material de este delito ambiental, que conlleva importantes sanciones económicas y penas de cárcel. La única pista con la que se trabaja es un coche que fue avistado en el lugar del incendio cuando se originaron los focos, pasadas las siete y media de la tarde.

Hasta el lugar de incendio se trasladaron alrededor de 80 personas en medios terrestres ya y aéreos. Los diferentes focos afectaron a diferentes robledales, brezales y pinar.

El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, hizo ayer un llamamiento a la colaboración para que este tipo de acciones criminales no queden impunes, solicitando la ayuda ciudadana para identificar al autor o autores para que puedan ponerse a disposición de la Justicia, ofreciendo los datos de que conozcan.

El fuego ha calcinado más de 30 hectáreas de arbolado. RAMIRO