Nadal lamenta que la moción del Congreso lastre la defensa del carbón ante Bruselas
El ministro califica la condena a las térmicas de «muy grave» y advierte de que no responde a razones económicas.
Central térmica de La Robla.
maría j. muñiz | león
«El planteamiento de la moción aprobada el martes en el Congreso de los Diputados hace que la situación sea muy grave. Estamos en medio de un proceso de negociación con la Unión Europea, y esta moción no ayuda, lo que menos falta hacía es contar ahora con una postura mayoritaria de los grupos políticos contraria a que las térmicas de carbón continúen funcionando». El ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, advirtió ayer en León de que «la postura del Parlamento no facilita las cosas al Gobierno para hacer una política sensata en favor del carbón».
Nadal respondía así a la moción aprobada el martes en el Congreso a propuesta de Unidos Podemos, que contó con el voto a favor de los diputados del PSOE y de Ciudadanos, además de otros grupos minoritarios; y a la que sólo se opusieron el PP y Foro Asturias. Una moción que entre otras medidas plantea retirar los pagos por capacidad a aquellas centrales que superen los 550 gramos de CO2 emitidos por kilovatio generado. LO que en la práctica condena a la desaparición a todas las térmicas de carbón.
El ministro criticó además que «se tomen decisiones tan drásticas por motivos meramente ideológicos, porque no existen razones económicas». Señaló que el Gobierno cuenta con una planificación que cuenta con el carbón nacional en el mix energético entre 2020 y 2030, pero «los grupos parlamentarios han dicho que el carbón tiene que desaparecer en esas fechas. Me parece irresponsable y no conocer la realidad del sector».
Entre otras cosas porque la medida «perjudica al conjunto de los españoles, ya que el carbón evita las puntas de precios. No contar con él implica que la electricidad será un 15% más cara».
Por último, destacó que la postura de Gobierno ante las autoridades europeas pasa por defender que «mientras se cumplan los objetivos de emisiones cualquier país puede decidir su mix energético. Ahí sí encajan las centrales de carbón, porque son útiles desde el punto de vista económico. Eliminarlas no tiene sentido».
Nadal destacó en que el Ejecutivo está buscando aliados en las instituciones europeas, porque «no todos los países están de acuerdo con la propuesta»; pero insistió en que ir con el Parlamento en contra es un lastre.
