Diario de León

Nadal afirma hacer «todo lo posible» porque continúe la quema de carbón

El ministro insiste en que las térmicas son esenciales para abaratar el coste energético.

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d. valera | madrid

La batalla entre el Gobierno y las eléctricas, especialmente Iberdrola, sigue adelante. El ministro de Energía, Alvaro Nadal, defendió ayer el mantenimiento de las centrales térmicas de carbón en el mix energético para abaratar los costes de la electricidad, frente a la intención de la compañía de Ignacio Sánchez Galán de cerrar dos de estas instalaciones. En concreto, Nadal explicó que si no hubiese carbón para cubrir la demanda cuando faltan las renovables —como ocurre actualmente por la ausencia de lluvia y viento— el precio de la electricidad se encarecería un 15% en el mercado mayorista. «Cuando no hay renovable el carbón es más barato que el gas, aunque emite más CO2», admitió el ministro. También avisó de que sin las nucleares el coste se elevaría un 25%.

Nadal consideró necesario el decreto que prepara para evitar el cierre descontrolado de centrales eléctricas. El objetivo —destacó— es garantizar que estas clausuras no supongan un apagón del sistema eléctrico, no provoquen un aumento de los precios y sean compatibles con los objetivos medioambientales. «Busca reorganizar estas situaciones», afirmó durante su intervención en El Agora de El Economista. Sin embargo, la normativa ha provocado el choque con Iberdrola por el cierre de las instalaciones térmicas de Lada (Asturias) y Velilla (Palencia) y ha puesto en guardia a la Comisión Europea.

«El Gobierno hace todo lo posible para que esas centrales rentables no se cierren», admitió. Y para ello considera que lo mejor es que si una empresa no quiere seguir en una instalación, se compruebe si otra compañías quieren gestionarla. «Algunas eléctricas dicen ‘o me bajas los impuestos o las cierro’. Vamos a ver si esto es rentable y a ver si alguien quiere encargarse de ello», señaló Nadal en una crítica velada a Iberdrola. En su opinión, poner a la venta una central es la «mejor manera» para saber si una central es rentable.

El ministro no dudó en cargar contra la eléctrica sin nombrarla. «Las centrales que se pretendían cerrar son rentables y cada vez que entran en el sistema han permitido que se abarate la electricidad y han ayudado a reducir el coste energético». En este sentido, Nadal explicó que si en los últimos tres años las «dos pequeñas centrales» que la compañía presidida por Ignacio Galán ha solicitado cerrar no hubieran estado en funcionamiento habrían provocado un incremento del coste de la electricidad de 38 céntimos en el mercado, lo que habría supuesto una pérdida de 100 millones para los consumidores.

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