PESE A LOS GRAVES DAÑOS EN EL CAMPO
La CHD no exime de los pagos a ninguna zona regable de León
La propuesta de resolución recoge las dotaciones de agua, pero no los daños en los cultivos.
A. Domingo | Redacción
La Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) no entra a valorar los daños ocasionados por la sequía en los regadíos y la exención de cánones de regulación y tarifas de utilización del agua para esta campaña pasa de largo para los regantes leoneses. Según una propuesta de resolución del organismo de cuenca, con fecha 30 de noviembre, sólo las zonas Carrión, Pisuerga y Bajo Duero dispusieron este año de dotaciones de agua inferiores al 50% de un año normal, motivo por el que los agricultores no pagarán por los conceptos citados.
En el resto de los sistemas, la campaña de riego se desarrolló «en condiciones de práctica normalidad, salvo por el establecimiento de turnos de riego a los aprovechamientos concesionales de los ríos Esla, Porma, Arlanzón, Alto Duero y Riaza». La CHD no incluye en esta situación de normalidad a los regadíos de los embalses dependientes de Los Barrios de Luna y Villameca, a los que, sin embargo, girará cánones y tarifas por no haber dispuesto de menos de la mitad de la dotación de agua de campañas sin restricciones.
La CHD elabora la propuesta de exención de pagos al amparo de lo dispuesto en el Real Decreto-Ley 10/2017, de medidas urgentes para paliar los efectos producidos por la sequía en determinadas demarcaciones hidrográficas. Dicha norma establece medidas de apoyo, entre éstas la exención de pagos a la confederación, para los agricultores de la cuenca del Duero cuando su dotación de agua fuera inferior al 50% de lo normal o sufrieran pérdidas de producción bruta en los cultivos de un 20% en zonas desfavorecidas y de un 30% en el resto, según establece la Unión Europea.
La CHD señala en la propuesta que la falta de lluvias obligó a limitar las dotaciones de agua en el Carrión —con una asignación de 2.000 metros cúbicos (m3) por hectárea—, Pisuerga-Bajo Duero —3.000 m3—, Órbigo-Tuerto —3.700 m3—, Porma — 4.800 m3— y Riaño —5.800 m3—. Estas asignaciones dejaban al primero de los sistemas con un 27% de la medida ponderada entre la dotaciones mayor y menor recogidas en el Plan Hidrológico del Duero. El Bajo Duero acometió la campaña con un 41% de los recursos medios, mientras que el Pisuerga lo hizo con el 48%. El Órbigo y el Tuerto superan la mitad de los recursos habituales en 7 puntos, mientras que el Porma dispuso del 67% y los regadíos de Riaño contaron con el 80%.
La propuesta de la CHD no incluye valoración alguna sobre las pérdidas de la producción bruta en las zonas regables, y establece la exención de pagos sólo en función de los recursos hídricos, sin motivar en los fundamentos de derecho que expone la razón por la cual no entra a valorar las pérdidas.
La valoración
En este sentido, la organización profesional agraria Asaja exigía a Consejería de Agricultura de la Junta de Castilla y León una valoración de los daños «formal y definitiva», que permitiera a los agricultores quedar eximidos de cánones y tarifas, ya que en ninguno de los sistemas se cumplía la premisa de contar con unas reservas de agua inferiores a la mitad de las de un año normal, gracias a las lluvias registradas entre el otoño de 2015 y hasta la primavera de 2016 y al ahorro de agua. Asaja entiende que la falta de precipitaciones en forma de lluvia y nieve y el excesivo calor del verano ha causado daños superiores al 20% en todas las comunidades de regantes de la provincia, cuando los agricultores libres de sus obligaciones de pago al organismo de cuenca.
Sin embargo, desde el Sindicato Central de Los Barrios de Luna se aseguró a finales del mismo mes que la valoración se estaba realizando, con una mayor probabilidad de que las pérdidas eximieran de cánones y tarifas a los regantes del Órbigo y el Tuerto.