Diario de León

LA ENTREVISTA

«La seguridad absoluta no existe pero vamos a intentar que disminuyan los robos»

MANUEL CUESTA ALLER / CAPITÁN DE LA GUARDIA CIVIL DE LA COMPAÑÍA DE aSTORGA

Manuel Cuesta Aller, en su despacho del Cuartel de la Guardia Civil de Astorga. MARCIANO PÉREZ

Manuel Cuesta Aller, en su despacho del Cuartel de la Guardia Civil de Astorga. MARCIANO PÉREZ

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A.G. VALENCIA | ASTORGA
León

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Tiene a su cargo 160 efectivos y nueve puestos. Desde Astorga coordina 4.300 Km2 de la provincia. «Una cuarta parte de León», dice. Guardia Civil con una dilatada trayectoria. 27 años en el cuerpo. Lo que más le gratifica es ayudar a las personas. Sin embargo recuerda con amargura el accidente de La Polinosa, donde murieron tres compañeros, y el accidente de tren de Villada (Palencia) en 2006. Llega a Astorga después de estar al mano del Servicio de Información de la Comandancia. «Nos ha tocado canalizar los esfuerzos en la amenaza del terrorismo yihadista», asegura.

—Con nueve puestos y 160 efectivos a su cargo, ¿Cómo afronta esta nueva etapa?

—Es una suerte poder venir destinado a Astorga. Es una etapa muy ilusionante. Todo capitán desea mandar una compañía territorial.

—¿Qué retos se marca?

—A nivel de seguridad ciudadana y delicuencial, en León tenemos unos datos muy positivos. Mi idea es mantener esos niveles o reducirlos, si es posible. En la compañía de Astorga, eminentemente rural, hay núcleos importantes en cuanto a población, como La Bañeza, Astorga o Valencia de Don Juan, pero también hay núcleos rurales donde la despoblación es evidente. Mi objetivo es llegar a todos, tanto en los núcleos grandes como en los pequeños, tenemos que tener presencia de la Guardia Civil para garantizar la seguridad de todos los ciudadanos. Otro reto importante es seguir trabajando contra la violencia de género, seguir manteniendo los protocolos y la protección. Quiero seguir en esta línea e incluso mejorar en el acercamiento a las víctimas y en su ayuda.

—La seguridad en el mundo rural se pone muchas veces en entredicho por los numerosos robos. ¿Cómo puede atajarse esta problemática?, ¿Se reforzará la vigilancia?

—Hay que tener en cuenta que es muy difícil empatizar al 100% con cualquier persona que es víctima de un hecho delictivo porque cada persona tiene sus peculiaridades. Vamos a ofrecer trabajo, dedicación y perseverancia. La seguridad absoluta es imposible, no existe, robos se van a seguir produciendo y otro tipo de hechos delictivos también, pero lo que vamos a intentar es que disminuyan.

—¿Considera que la justicia es dura es estos casos?

—La Justicia, como todo, está sujeta a las leyes. Yo no puedo decir si estoy o no de acuerdo, lo que está claro es que la Justicia puede ser lenta pero es implacable. Al final quien comete un hecho delictivo, lo paga.

—Otro de los males que atañen al mundo rural son los incendios forestales. El último arrasó 10.000 hectáreas en La Cabrera, ¿Cómo avanzan las pesquisas para esclarecer el origen del siniestro?

—Desde el punto de vista policial debemos afrontar los incendios forestales con medidas preventivas y disuasorias para el delincuente que vaya a incendiar el monte. También hay que investigar las causas y poner a disposición judicial a los autores de hechos tan execrables. En relación al siniestro de la Cabrera, lo está llevando el Seprona bajo la dirección del Juzgado de Astorga. Está en proceso de investigación.

—En Astorga está centralizado el equipo Roca, de investigación de robos en el campo. ¿Cómo funciona?, ¿Qué balance arroja?

—El equipo Roca ha sido un acierto para investigar de una manera específica los robos en el campo. Funcionalmente dependen de la Comandancia. Está formado por unos magníficos profesionales y no hay más que ver el reflejo de sus actuaciones. En 2017 esclarecieron 85 infracciones penales y entre detenidos e investigados sumaron 70 personas.

—En cuanto a personal, instalaciones y material... ¿Es suficiente?, ¿Alguna reivindicación?

—La plantilla de personal está bastante ajustada. Aquí en León, y en la compañía de Astorga, tenemos prácticamente todas las vacantes cubiertas. En cuanto a material e instalaciones, se ha realizado un esfuerzo inversor en los últimos años y todas las unidades tienen unas dependencias lo suficientemente dignas, aunque todo es mejorable.

—En La Bañeza nunca llegó a construirse el nuevo cuartel. ¿Es un proyecto que podrá retomarse?

—La inversión que no depende de nosotros. El Ministerio del Interior tiene que distribuir los recursos en función de las distintas necesidades. A La Bañeza no sé cuándo le tocará que le construyan un nuevo cuartel, pero todo lo que sea mejorar en instalaciones repercutirá en el servicio que le demos a los ciudadanos.

—¿Es necesaria un Equipo de Policía Judicial para la Compañía de Astorga?

—Claro que me gustaría contar con el equipo, pero tienen que darse las circunstancias. Por el momento estamos atendidos adecuadamente por la Unidad de Policía Judicial de la Comandancia.

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