El PSOE logra derogar la norma sobre los purines para no perder las ayudas europeas
dl | león
El Congreso aprobó la semana pasada en la Comisión de Agricultura una Proposición no de Ley del Grupo Socialista para suspender la entrada en vigor del Real Decreto 980/2017 y revocar las medidas que este contiene relativas a la aplicación de purines y estiércoles sólidos en las superficies agrícolas.
La portavoz socialista en el debate, Margarita Pérez Herraiz sostiene que «los socialistas estamos firmemente comprometidos con la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y por eso consideramos que el Gobierno debe adoptar con urgencia, y en coordinación con las administraciones públicas afectadas, medidas precisas y efectivas para reducir dichas emisiones en relación a aquellas actividades y sectores económicos más contaminantes».
Sin embargo, ha criticado «las incoherencias del Gobierno, pues para reducir las emisiones de amoníaco actúa sobre quienes no son los principales responsables de dichas emisiones y, además, lo hace condicionando los pagos directos de la política agraria común cuando entre las posibles causas de condicionalidad de dichos pagos no se encuentra la contaminación del aire».
«La primera irregularidad es que el Gobierno establece como condicionalidad la calidad del aire cuando no está prevista esta condicionalidad en la normativa europea», —ha explicado—. «La segunda irregularidad es que, para disminuir las emisiones de amoníaco, el Gobierno actúa sobre los que ocupan el tercer lugar como responsables de dichas emisiones, sin actuar sobre los dos principales».
Así, ha apuntado que en España el 19,7% de las emisiones de amoníaco procede de fertilizantes de síntesis, el 4,4% de vacuno lechero, el 9,3% de vacuno no lechero y el 17,5% de porcino. «Las actividades agrícolas y ganaderas constituyen en torno al 95,23% del origen de emisiones de NH3 pero el 68,01% de ese porcentaje se debe a cultivos con fertilizantes (excepto estiércol animal) y el 31,03% a gestión de estiércol».