RABANAL DEL CAMINO El inmueble sufrió daños que llevan a plantearse su demolición
Sufre quemaduras en un 30% del cuerpo al producirse una explosión en su casa
A. Domingo | Redacción
Un vecino de Rabanal del Camino, de 68 años, sufrió ayer quemaduras en alrededor de un 30% de su cuerpo a consecuencia de la explosión que se registró en su vivienda, situada en la calle Real, de Rabanal del Camino —término municipal de santa Colomba de Somoza. La deflagración se produjo pasadas las cuatro y media de la tarde, a consecuencia de un escape de gas de una estufa catalítica, según apuntan los primeros indicios de la investigación. Los daños que se produjeron en el inmueble son cuantiosos y tanto el Ayuntamiento de Santa Colomba de Somoza como los Bomberos de León consideran que serán necesario derribarlo, aunque aún es preciso disponer de un informe técnico. El herido fue trasladado en helicóptero medicalizado al Complejo Asistencia de León.
Según quienes se acercaron hasta el lugar del suceso, aún se podían haber producido más daños, por encontrarse el inmueble afectado en pleno Camino de Santiago, con un tránsito de peregrinos importante en esta localidad. Además, no hubo daños en otros edificios al encontrarse rodeado de huerta el afectado.
«Es como si se hubiera levantado el tejado y hubiera vuelto a caer sobre la casa», comentaba un testigo, frente a la importante brecha que se abrió en una de las fachadas, mientras que otra adornaba la principal. La explosión produjo un gran revuelo entre vecinos y romeros, que, alarmados, empezaron a buscar a su vecino entre los escombros hasta localizarlo. Mientras, se daba aviso a los servicios de emergencias, personándose en el lugar Guardia Civil, una dotación del Parque de Bomberos de León, una uvi móvil y un helicóptero medicalizado.
Los testigos señalaron que el herido hablaba mientras el personal sanitario le aplicaba las primeras curas y lo estabilizaba para su traslado al centro hospitalario de la capital leonesa, cuidados que, señalaron, llevaron un buen rato. Las mismas fuentes destacaban que el herido refirió antes de su partida que la explosión se produjo cuando se disponía a encender un cigarro. La estufa, alimentada por una bombona de butano, se encontraba en la planta baja de la vivienda y no se ha precisado aún el motivo del escape.
Una dotación de seis bomberos del parque municipal de León, movilizada al conocerse que los escombros atrapaban en el interior de la vivienda a su único morador, fue la encargada de acabar con el escape de gas.
Corte al tráfico
La magnitud del siniestro impedía el uso de la calle, llena de material. Según explicó ayer el alcalde, José Miguel Nieto, finalmente se optó por cortar la calle al tráfico y habilitar un paso para los peregrinos y otros usuarios de la vía por una huerta colindante, para evitar que un derrumbe pueda alcanzarlos.
El regidor espera que hoy visite la casa un técnico y se decida si se inicia un expediente de ruina para su derribo o si, por el contrario, es posible su arreglo, aunque se mostró pesimista en cuanto a esta segunda opción. Señaló que el Ayuntamiento iniciará gestiones con el fin de que el herido disponga de una residencia cuando sane de sus heridas.