EL FUTURO DE LA MINERÍA
El Gobierno retira el ‘céntimo verde’ al gas pero no al carbón
La minería interpreta la medida como una señal para desincentivar la inversión en las térmicas
El Real Decreto Ley de Medidas Urgentes para la Transición Energética y la Protección de los Consumidores que ayer publicó el Boletín Oficial del Estado ha vuelto a despertar las señales de alarma en el sector de la minería del carbón, que el lunes tiene pendiente una nueva reunión con el Gobierno para diseñar las líneas de actuación para los próximos años. Un encuentro en el que se espera la anunciada señal de «voluntad política» que la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, prometió a los sindicatos mineros hace unos días.
De momento, lo que recoge el Real Decreto con el que se pretende frenar el impacto del continuo encarecimiento de la luz en las cuentas de los hogares es una apuesta por el gas como fuente de generación con combustibles, mientras que se ignoran medidas similares para la generación con carbón.
En su disposición final primera el decreto de medidas urgentes del Gobierno introduce una exención en el Impuesto Especial de Hidrocarburos que retira el denominado ‘céntimo verde’ para el gas. La normativa de Impuestos Especiales había suprimido un apartado que ahora se retoma, y que establece las operaciones que están exentas del impuesto. Añade «la producción de electricidad en centrales eléctricas o a la producción de electricidad o a la cogeneración de electricidad y de calor en centrales combinadas», es decir, las que utilizan el gas. Se refiere a instalaciones incluidas en la Ley del Sector Eléctrico de 2013 y especifica que habla de centrales eléctricas y de centrales combinadas.
En cambio, no introduce cambios en las exenciones contempladas en el artículo 79, que se refiere a las ventas de carbón en el ámbito territorial de aplicación del impuesto y que no incluye a las centrales térmicas en su redacción actual. Tampoco aparecen en la norma publicada ayer, que fue aprobada el viernes por el Gobierno.
La normativa publicada en el BOE señala que «se pretende acelerar la transición a una economía descarbonizada, mediante una mayor integración de las energías renovables, el fomento de la movilidad sostenible y la eficiencia energética».
Tras la aprobación de este paquete de medidas urgentes la ministra de Transición Ecológica señaló que el «mal llamado ‘céntimo verde’ está pensado para desincentivar el uso de fuentes de energía ligadas a hidrocarburos», que afecta a las centrales de ciclo combinado de gas y las de carbón, que son las más caras del mercado marginalista y marcan el precio de las demás tecnologías de generación cuando se produce la casación.
Normativa fiscal
El real decreto adopta medidas sobre la normativa fiscal «con el objetivo de moderar la evolución de los precios en el mercado mayorista de electricidad». Además de suspender el impuesto del 7% a la generación eléctrica durante seis meses, modifica la Ley de Impuestos Especiales «para introducir una exención en el Impuesto sobre Hidrocarburos para los productos energéticos destinados a la producción de electricidad en las centrales eléctricas o a la producción y a la cogeneración de electricidad y calor en centrales combinadas».
Un gravamen que, señala el propio texto, «afecta principalmente a las centrales de ciclo combinado de gas natural, y que es trasladado a los precios finales en las horas en que esta tecnología fija los precios del mercado mayorista, por lo que su exención, que ya existía antes de la entrada en vigor de la ley de 2012 de medidas fiscales para la sostenibilidad energética, permitirá eliminar el efecto multiplicador de esos impuestos sobre los precios del mercado mayorista con carácter permanente, teniendo un impacto tanto mayor cuanto mayor sea el comportamiento marginal del gas natural en dicho mercado».
Intención de cerrar las térmicas
El hecho de que el Real Decreto aprobado por el Gobierno se refiera a la generación con gas natural, pero no mencione a las térmicas, se interpreta desde el sector minero como una nueva señal de la intención del Ministerio de Transición Ecológica de no apoyar la continuidad de la generación con esta tecnología, y por tanto de dar la puntilla a la minería del carbón. El hecho de que no se haya modificado el artículo que debía retirar el ‘céntimo verde’ al carbón, como se ha hecho con el gas, se interpreta como un ataque al mineral autóctono; ya que se incentiva la competitividad de los ciclos combinados frente a las térmicas. Todo ello en un momento especialmente delicado, en el que el Gobierno sigue enviando a las empresas eléctricas señales que les hacen decantarse por no llevar a cabo la inversión para adaptarse a la directiva medioambiental europea.
Lo que en la práctica supondría el cierre de las térmicas a mediados de 2020, y pone en duda también que contraten carbón autóctono para el próximo ejercicio, que es lo que se está negociando en este momento. De ser así, un varapalo definitivo para la minería.