Imatec abandona el polígono al no obtener licencia para su ampliación

A. DOmingo | Redacción

Inyección de Materiales Técnicos, S.L. (Imatec), dejará en breve el Polígono Industrial Los Avezales, en Otero de las Dueñas (municipio de Carrocera), para instalarse en León ante la imposibilidad de ampliar sus instalaciones y crecer, indicó el empresario Justino Luengos, que ha visto denegada en dos ocasiones, «por silencio administrativo», la licencia para construir las instalaciones fabriles que precisa la firma.

La fábrica de inyección de plásticos, que se fundó en 2003, ha presentado una oferta para el proceso de enajenación de parcelas para uso industrial que convocó este mes de agosto el Consorcio Urbanístico del Polígono Industrial de León y espera ahora su resolución.

Imatec solicitó licencia para de ampliación por primera vez en 2007, sin que se le otrogara, y volvió a pedirla el 1 de junio del año pasado. Acompañaba a la solicitud «el correspondiente proyecto de obra, visado por el Colegio de Ingenieros, con una inversión de 883.468 euros». Pero el Ayuntamiento de Carrocera no respondió a la solicitud, sostiene el empresario, e Imatec perdió entonces «una ayuda de 250.000 euros», al no poder justificar las obras correspondientes. El subsidio llegaba de la Unión Europea a través del Grupo de Acción Local Cuatro Valles.

Sin ampliación, la mercantil recurrió a «externalizar trabajo, al no poder realizarlo en nuestras instalaciones, con el consiguiente sobrecoste de almacenamiento y transporte», motivo por el que planteó este año una reclamación de responsabilidad patrimionial ante el Ayuntameinto de Carrocera, titular de un polítgono industrial, que Imatec considera «fantasma», ante la imposibilidad de ampliar las instalaciones y por la carencia de servicios como depuradora o hidrantes para extinción de incendios, señaló Luengos.

Al contencioso

La empresa reclama «los daños derivados de la imposibilidad de crecer», que le han impedido «estar en situación de facturar el doble e incluso duplicar la plantilla», que ahora está en diez trabajadores. Imatec reclama «500.000 euros al Ayuntamiento de Carricera» y espera la resolución del expediente. Si esta no satisface sus expectativas planteará un contencioso administrativo. Teniendo en cuenta los plazos legales, el recurso llegará a los tribunales «antes de que termine el año».

¿Pero cómo en un polígono industrial por el que ha mostrado interés Asturiana de Laminados (Asla) para llevar a cabo un proyecto con 100 puestos de trabajo puede ocurrir que una empresa no pueda ampliar sus instalaciones? Luengos señala que el problema se produce «cuando el Ayuntamiento tramitó sus normas urbanísticas».

Así, la primera fase del polígono se vende «como suelo urbano consolidado, según las normas urbanísticas provinciales», pero cuando en 2013 se tramitó el nuevo planeamiento se incluyó la totalidad del polígono en una unidad de suelo urbano no consolidado, sin diferenciar los solares industriales de la primera fase. «Por lo tanto, existe un engaño para quienes habíamos comprado suelo y nos encontramos con un terreno rústico», como sucedió con la parcela que ocupa en la actualidad Imatec, la que adquirió la mercantil desde un principio para una posible ampliación y «la que se apalabró en su día con el Ayuntamiento» con el mismo objetivo.

«para la Junta no existe»

«Cuando adquirimos las parcelas tuvimos que cumplir una serie de requisitos, como un plazo para la construcción, un aval... Y en el Registro de la Propiedad se recogió que la enajenación de las parcelas, de la Junta Vecinal de Otero de Las Dueñas, se realizaba con el fin exclusivo de que se dedicaran a construir un polígono industrial», explicó Luengos, que incidió en que «para la Junta de Castilla y León no existe ese polígono industrial, sino suelo rústico». Por esta razón, la licencia de obra para levantar la fábrica en su día «debería haberse tramitado como un uso excepcional de suelo rústico», aseguró.

El empresario lamenta la situación que vive un polígono «construido con fondos mienros» para la reactivación económica de la zona, con cinco empresas en la actualidad, «que no tienen opción de ampliar sus instalaciones».